Rosetta, la primera nave en orbitar un cometa

"Crucen los dedos", pedía el responsable de conducir el acto que se celebró en la sede de la ESA en Alemania. Desde allí se podía seguir en directo la trayectoria de la sonda, que exactamente  a las 11:29 cumplía su misión. "Estamos en el cometa", ha anunciado el responsable de la operación en la sala de control.

El objetivo de la nave Rosetta era colocarse a unos 30 kilómetros de la roca, de modo que entrara en su órbita. Ahora la nave continuará acercándose al cometa 67P/Churyumov-Gerasimenko durante los próximos meses y está previsto que la sonda que contiene logre aterrizar en noviembre. Durante la aproximación, la nave irá obteniendo datos acerca de la composición, densidad y gravedad del cometa para que los científicos sepan qué se van a encontrar.

En este sentido, el coordinador de operaciones científicas de Rosetta, Laurence O'Rourke, ha indicado que este mes se seleccionarán algunos posibles lugares para el aterrizaje en el cometa que tiene unas dimensiones aproximadas de alrededor de cuatro o cinco kilómetros. Sin embargo, como ha adelantado, no será hasta octubre cuando se determine el lugar definitivo.

"No dependerá sólo de que sea plano, porque la superficie de los cometas sufre explosiones y habrá que tener en cuenta también dónde hay aspectos buenos para estudiar. Por eso se hace este trabajo conjuntamente entre científicos e ingenieros, porque cuentan los aspectos técnicos, pero también los de investigación", ha declarado O'Rourke.

Cuando la nave esté lo suficientemente próxima, expulsará una sonda - que responde al nombre de Philae- para que esta aterrice en la superficie y volverá a alejarse del cometa.  O'Rourke ha indicado que la misión de la sonda será permanecer allí para ofrecer datos. Según ha señalado,  entre sus instrumentos, contiene un taladro que perforará el cometa y estudiará su composición 'in situ'.

La intención de la ESA es que este aparato permanezca activo una semana como mínimo "aunque si dura más será estupendo". "Aunque sea una semana será una semana de ciencia maravillosa", ha apuntado O'Rourke.

Otro de los coordinadores de la misión, Michael Kueppers, ha indicado que este proyecto podría arrojar respuestas sobre si la teoría de que la vida llegó a la Tierra a través de estas rocas es cierta. "Los cometas tienen información sobre nuestros orígenes y son iguales a los bloques que hace 4.000 millones de años formaron los planetas", ha explicado.

Aún así, ha especificado que esta creencia no significa que las moléculas microbianas procedan todas de los cometas, sino que, en combinación con las existentes en la Tierra, llegaron a conseguir lo que hoy existe. En cuanto a las teorías sobre que el agua llegó al planeta desde los cometas, Kueppers ha apuntado a que la misión Rosetta también permitirá comparar ese agua que se sabe que contiene con el agua de los océanos terrestres y comprobar si existen diferencias.

La nave Rosetta ha llegado a su destino diez años después de su despegue, en marzo de 2004. Durante ese tiempo ha viajado por el Sistema Solar y ha permanecido en hibernación un total de 957 días. España participa en la misión a través de la empresa GMV.