Ayer se publicaban las actas de la última reunión de la Fed. El interés de las mismas estaba en buscar alguna señal sobre la discusión interna entre los miembros del Comité en relación a cuándo subirán los tipos de interés desde los mínimos actuales. Pues bien, lo que se desprende en las actas es que el debate en la Reserva Federal en torno a su orientación sobre los tipos de interés se intensificó el mes pasado, con varios funcionarios diciendo que la Fed corre el riesgo de ser malinterpretada por los inversores con su actual visión y presionando por un enfoque más dependiente de los datos. También muestran una preocupación por la apreciación de dólar, la desacelerada inflación y la situación económica en Europa y Asia, factores que apoyan la actual postura del organismo de mantener una política expansiva en el futuro cercano. De hecho en las actas se recoge que "se planteó la preocupación de que la referencia a "un período considerable de tiempo" en la actual orientación a futuro podría ser malinterpretada como un compromiso en vez de ser dependiente de los datos". La mayor intensidad del debate sugiere que la Fed podría tomar medidas en su próxima reunión del 28-29 de ese mes para cambiar su retórica en cuanto a la interpretación de cuándo podría comenzar a subir los tipos de interés. A este respecto, ayer el presidente de la Fed de Chicago, que el próximo año ocupará un puesto en el Comité, instaba a la Reserva Federal a que sea paciente con la subida de tipos de interés, destacando los riesgos de una caída tanto del crecimiento como de la inflación.
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