'La ciudad oscura', de Antonio Rojano, un apasionante rompecabezas teatral, con nuestra historia más reciente de fondo

El montaje de 'La ciudad oscura' está dirigido por Paco Montes, e interpretado por Fernando Soto, que encarna a dos personajes, el Autor y a Álvaro Rojas; Ana Otero es la contundente, implacable y quebradiza Inspectora Vega; Paco Lahoz construye dos personajes llenos de fuerza e intensidad, El alemán y El comisario; Irene Ruiz es la hija del Autor, Dakota, al tiempo que encarna a Claudine y a Lara; Mario Tardón es también el Inspector Nieto y un Parapsicólogo y, por último, Pilar Gómez interpreta a cuatro personajes: parapsicóloga, veterinaria, periodista y jockey.

Los catorce personajes a quienes dan vida estos seis extraordinarios actores dan ya idea de la complejidad de la trama que ha urdido Antonio Rojano en esta pieza, con claras y confesadas influencias del western, en donde la acción trepidante, las sorpresas argumentales y los conflictos internos de los personajes y los externos de la lucha de intereses políticos y económicos en los que se ven envueltos, hacen pasar a los espectadores unos ochenta minutos llenos de interés, expectación y hasta ansiedad por acabar sabiendo donde diablos va a ir a parar tan rocambolesca historia.

En esencia, el argumento de 'La ciudad oscura' cuenta como un dramaturgo escribe una obra de teatro con la ayuda de Dakota, su hija, una joven tan amante de la palabra como rebelde ante la tarea que le ha solicitado su padre. Esa rebeldía, que no es solo generacional como muy pronto descubrimos, esconde un asunto tenebroso del pasado, que enturbia la relación de ambos, que iremos descubriendo poco a poco, a medida que avanza la historia.

Pero, paralelamente y a medida que va avanzando el texto de la obra, asistimos también al suicidio de un jockey, que desatará un sinfín de hechos a su alrededor de indudables connotaciones políticas en torno al golpe de estado del 23 de febrero de 1981, que investigan dos inspectores de policía, convencidos de que el suceso no es una muerte más y que existen claras conexiones con el pasado histórico reciente de este país.

Puzle

En escena, una mesa de despacho con sillón, en donde el autor escribe su pieza dramática. Las paredes blancas reflejan la luz del día. Hay anotaciones y flechas (dcha. 1, dcha. 3 abajo). En las columnas, varias fotos de carreras de caballos, cabezas de caballos, jockeys. Por otro lado, fotos del rey Juan Carlos, de las elecciones con Suárez...

'La ciudad oscura' está dividida en seis partes, un prólogo inicial, El terror, que arranca en 1995, en el Valle de los Caídos, en donde dos parapsicólogos están intentando descifrar ciertas voces captadas en una grabadora, y cinco partes o actos más: Un muerto y una carrera de caballos; La parte de los policías; El golpe del 23 F (mágico ese momento en que los seis actores narran al alimón el 23 F como una carrera de caballos -Suárez, Tejero, Milans del Bosch, Armada...-); Los poseídos (lleno de fuerza también el discurso de Otto Rosenberg -interpretado magníficamente por Paco Lahoz-, líder de Nuevo Amanecer, "¿Quién fija la voluntad del pueblo?, ¿quién educa al pueblo?"); y, por último, Las tinieblas. Operación eklipse ("la creación genera monstruos").

Este extraordinario rompecabezas teatral que mantiene al espectador atónito y sorprendido por la sucesión de escenas sin aparente interconexión, poco a poco, van cobrando sentido hasta cerrar el círculo que explica las tensiones entre el autor y su hija Dakota.

Un Autor -el personaje de la obra-, por cierto, que el mismo Rojano confiesa en su blog personal que tiene mucho que ver con él mismo: "Desde sus primeras líneas, siempre fui consciente de que yo quería participar. De que, si iba a hablar de un autor, ese autor debía ser yo y, sin dudarlo, opté por utilizar mis propias vivencias y opiniones. Mi propia materia vital. Y me dejé arrastrar por la autobiografía".La pasión confesada por el cine del oeste de Antonio Rojano, ha hecho que el joven autor cordobés haya escrito una pieza con la misma estructura que esos clásicos de la pantalla grande, solo que trasladada de los desiertos de Arizona a la castiza Madrid y con personajes vinculados a nuestra historia más reciente, con buenos y malos que unas veces se baten al plomizo sol del mediodía y, las más, en la oscuridad de las cañerías y las cloacas del estado.

Y, como en su estreno anterior, recurriendo a personajes patrios un tanto estrafalarios, Rojano descubre aspectos escondidos pero ciertos de la personalidad de los españoles en los que fácilmente pueden identificarse o identificar ('Ascensión y caída de Mónica Seles', una tragicomedia de la España 'cañí' -https://www.diariocritico.com/ocio/teatro/critica-de-teatro/ascension-caida-de-monica-seles/474068-). Pero eso es, justamente, el teatro, y la vida. 'La ciudad oscura', de Antonio RojanoSala de la Princesa del Teatro María Guerrero Del 18 al 29 de marzo. (De martes a sábados a las 18.30 y los domingos a las 17.30).