El nuevo impuesto que planea el Gobierno y que cabrea a media España: por usar las carreteras

Los impuestos y las tasas son siempre un problema para los políticos, porque no hay nada más impopular para la ciudadanía que hacerle pagar más por su realizar su vida diaria. Por eso ha causado gran malestar el globo sonda aparecido en la prensa sobre que el Gobierno de Pedro Sánchez estaría planteándose un nuevo impuesto: uno por usar las carreteras.

Para que no lo paguen todos los ciudadanos, sino lo que usan un vehículo, se ha planteado una tasa a modo del impuesto de circulación que se pagan en los ayuntamientos o el impuesto de matriculación.

El Ejecutivo de coalición se plantea un nuevo impuesto del cual ha informado a la Comisión Europea para la reforma fiscal, donde se dice, literalmente, que se podría "crear un pago por uso de la red viaria de carreteras".

La noticia la adelantó 'El País' y el Gobierno estaría pensando implantarlo de cara al próximo año, 2022, casi inmediato. Otro motivo más para empeorar su imagen y sus perspectivas de voto, sobre todo tras el batacazo electoral en Madrid.

Y no sólo eso: los de Pedro Sánchez también meditan fijar otra tasa progresiva en función de la categoría contaminante de cada vehículo. Según la 'SER', se fijaría en función de la "revisión de las figuras tributarias que gravan la matriculación y la utilización de vehículos con objeto de adaptarlas a estándares medioambientales".

Otro cambio sería la "revisión de las bonificaciones de los hidrocarburos utilizados como carburante para la equiparación progresiva de los tipos impositivos en atención a su poder contaminante".

Estos nuevos impuestos, además de poco populares, incumplen el compromiso del Gobierno de no castigar más a las rentas medias y sólo subir impuestos, en tal caso, a las rentas altas.