Un futbolista que ha ganado 6 Champions League, 5 Mundiales de Clubes, 4 Ligas, 5 Supercopas de Europa, 2 Copas del Rey, 4 Supercopas de España y 1 Copa Intercontinental de la FIFA... un total de 28 títulos en el Real Madrid.
Este es el palmarés envidiable de Luka Modric vestido de blanco, además de un Balón de Oro que ganó en 2018.
El partido del próximo sábado ante la Real Sociedad será su despedida del Santiago Bernabéu, mientras que su adiós oficial será tras el Mundial de Clubes.
"Ha llegado el momento. El momento que nunca quise que llegara, pero así es el fútbol, y en la vida todo tiene un principio y un final... El sábado jugaré mi último partido en el Santiago Bernabéu", escribió el croata en sus redes sociales. Por su parte, el Madrid le despide con una imagen en la que pone "gracias, Luka".
"Llegué en 2012 con la ilusión de vestir la camiseta del mejor equipo del mundo y con la ambición de hacer cosas grandes, pero no me podía imaginar lo que vino después. Jugar en el Real Madrid me cambió la vida como futbolista y como persona. Me siento orgulloso de haber formado parte de una de las épocas más exitosas del mejor club de la historia", remarcó Modric en su comunicado.
Además, en el Mundial de Clubes podrá ampliar su amplísimo palmarés como jugador del Real Madrid.
El comunicado completo
"Ha llegado el momento. El momento que nunca quise que llegara, pero así es el fútbol, y en la vida todo tiene un principio y un final… El sábado jugaré mi último partido en el Santiago Bernabéu. Llegué en 2012 con la ilusión de vestir la camiseta del mejor equipo del mundo y con la ambición de hacer cosas grandes, pero no me podía imaginar lo que vino después.
Jugar en el Real Madrid me cambió la vida como futbolista y como persona. Me siento orgulloso de haber formado parte de una de las épocas más exitosas del mejor club de la historia.
Quiero dar las gracias de corazón al club, especialmente al presidente Florentino Pérez, a mis compañeros, entrenadores y a toda la gente que me ha ayudado durante todo este tiempo. A lo largo de estos años he vivido momentos increíbles, remontadas que parecían imposibles, finales, celebraciones y noches mágicas en el Bernabéu… Lo hemos ganado todo y he sido muy feliz. Muy, muy feliz.
Pero más allá de los títulos y las victorias, me llevo en el corazón el cariño de todos los madridistas. De verdad que no sé cómo explicar la conexión tan especial que tengo con vosotros y lo apoyado, respetado y querido que me he sentido y me siento. Nunca olvidaré cada ovación y todos los gestos de cariño que habéis tenido hacia mí.
Me voy con el corazón lleno. Lleno de orgullo, de gratitud y de recuerdos imborrables. Y aunque, tras el Mundial de Clubes, ya no vaya a vestir más esta camiseta sobre el césped, yo siempre seré madridista.Nos volveremos a ver. El Real Madrid siempre será mi casa. Para toda la vida.
Hala Madrid y Nada Más".