La violencia marcó el referendo autonómico en Santa Cruz

Las mesas de votación del referendo autonómico de la región boliviana de Santa Cruz comenzaron a cerrarse el domingo, pasadas las ocho horas establecidas en el Código Electoral del departamento.

Según explicaron fuentes de la Corte Departamental Electoral, las mesas se abrieron a las 08.00 hora local (12.00 GMT) pero se dio un margen de dos horas más por si había problemas en la apertura, de manera que el momento del cierre puede fluctuar.

Además, si al finalizar las ocho horas previstas para la votación todavía hay gente en las filas, la mesa debe permanecer abierta hasta que el último elector deposite su sufragio.

Unos 935.959 cruceños fueron convocados a las urnas, ubicadas en 675 recintos electorales, para decidir si quieren dotarse de un estatuto autonómico, que, según las encuestas difundidas en los últimos días, obtendrá un amplio apoyo cercano al 70 por ciento.

El referendo autonomista de la región boliviana de Santa Cruz se celebró en medio de brotes violentos en zonas del departamento controladas por el oficialismo, donde más de 20 personas resultaron con heridas de diversa consideración.

El referendo de Bolivia supone un momento crítico en el conflicto político que vive el país, donde el movimiento autonomista que lidera Santa Cruz está enfrentado al proyecto de refundación constitucionalista de Evo Morales.

El vicepresidente boliviano, Álvaro García Linera, aseguró que el Gobierno no tiene fricciones con los procesos autonómicos, sino con "élites regionales que intentan usufructuar esta demanda democrática a favor de intereses mezquinos y conservadores".

"La clave es cómo estos sectores pueden quedar aislados para permitir que la demanda autonómica, que el Gobierno también apoya, pero en el marco legal, pueda viabilizarse", señaló en una entrevista publicada en el diario argentino Clarín.

Por su parte, el ex presidente de Bolivia, Jorge Quiroga, afirmó que el referendo autonomista de Santa Cruz determinará que "queremos una Bolivia con autonomía regional y soberanía del país" y "no una colonia del señor Chávez".

En rueda de prensa en Santa Cruz, el líder del partido conservador Podemos garantizó que este referendo no pone en juego la unidad del país o la estabilidad del Gobierno, en contra de lo que, según dijo, argumenta el Ejecutivo de Evo Morales para "empañar" el proceso.

La consulta autonomista de Santa Cruz es, según el dirigente opositor, un "paso fundamental" para la autonomía regional y para tener una república "soberana e independiente del influjo" del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, que, a juicio de Quiroga, "tutela y manipula" al Gobierno de Morales.