www.diariocritico.com

El encastado primero y muy poco el quinto se salvaron del petardo ganadero

Uno de los escasos pasajes de buen toreo del festejo: Urdiales, ante el quinto.
Uno de los escasos pasajes de buen toreo del festejo: Urdiales, ante el quinto. (Foto: Plaza1)

San Isidro: sólo volutas de buen toreo de Urdiales en moruchada de Alcurrucén

Ferrera no aprovechó del todo a 'Zambombo' y Urdiales en el 2º y Ginés Marín en su lote se estrellaron

sábado 08 de junio de 2019, 22:00h
Es raro que una ganadería tan larga como la de Alcurrucén pegue dos petardos seguidos. Pero ya lo ha conseguido y a sus propietarios, los Lozano, hay que darles la 'enhoramala'. Porque si hace exactamente una semana el juego de los bureles fue penoso, este viernes fue peor: una auténtica moruchada general con una excepción, la del primero. Ante ellos se estrelló la terna de forma desigual. Porque únicamente el buen concepto clásico de Diego Urdiales pudo dejar algunos detalles, volutas de su estilo, ante su segundo. Ferrera, sin estar mal, no sacó todo lo que le ofrecía el que abrió festejo y Ginés Marín no tuvo opciones. El sábado, en la tercera y última de rejoneo, con toros reglamentariamente despuntados de El Capea y Carmen Lorenzo, salieron a hombros, tras cortar dos orejas cada uno, Pablo Hermoso de Mendoza y Lea Vicens, que actuaban mano a mano.

La tarde comenzó bien y acabó pésima. Bien, porque el que abrió función, de paradójico nombre 'Zambombo' cuando era un ejemplar 'colorao chorreao' de preciosa estampa, además de cumplir mínimamente en el caballo, sacó comportamiento encastado a la hora de la flámula que manejaba Antonio Ferrera. Y, aunque al extremeño, acelerado al principio, le costó dominar las embestidas de su enemigo, tras una bella pelea entre ambos, acabó luciéndose por redondos y naturales incluida una espaldina que se convirtió en largo cambio de mano.

No obstante la faena del extremeño, con la emoción de la casta del funo, estuvo preñada de altibajos, por debajo de la calidad de 'Zambombo', y aunque le mató a la primera, la petición de oreja no fue mayoritaria. Mas aunque nos las prometíamos felices, todo fue un espejismo hasta el quinto burel, con un desfile de tres bueyes con cuernos -eso sí,impresionantes los del segundo-, la antítesis del toro de lidia. Como fue el segundo, al que Urdiales le buscó las vueltas y revueltas para nada.

Encima, el tercero, con volumen pero feísimo, no tenía fuerza casi ni para vivir, razón por la que debió volver al corral, pero el usía no lo estimó oportuno. Con lo que dejó a Ginés Marín, que aspiraba a redondear su feria tras la oreja que cortó el pasado miércoles, sin ninguna opción, ya que el bicorne no tardó en hocicar la arena: al segundo muletazo.

Con el siguiente, que se defendía tanto que pegaba hachazos a los engaños aunque por su nobleza nunca a los coletudos, Ferrera intentó reconducir su comportamiento de mansazo a base de técnica y oficio, y algo logró. Pero el morucho, amén de cobardica, no le permitió más que algún muletazo suelto con la derecha y pare usted de contar.

Así, empeorando, llegamos al ya relatado quinto, un toraco muy ofensivo de pitones, y casi tan descastado como el resto.Casi porque, Urdiales, que se lució por verónicas en el único quite artístico de toda la tarde, a base de sobarle y sobarle fue capaz de festonear su elegante estilo de coletudo sazonado y clásico. Tardó, pero valió la pena disfrutar de dos series cortas al natural, una de ellas citando de fente con mucha verdad, y otras en redondo, adem´s de una monumental trincherilla. Fueron sólo volutas, pero al cotarro le supieron a gloria, máxime con el estoconazo con que el riojano le despenó.

Y de esta manera nos metimos en el último con la esperanza, mínima a fuer de sinceridad, de que el animal mejorara la línea -y el bingo- general de sus hermanos. Pero, no. Fue el más morucho y cobardica -mejor, cobardón- de todos, pues huía no sólo de percales y pañosas, sino hasta de su sombra, con lo que Marín no tuvo más remedio que acabar pronto con él.

FICHA

Cinco toros de ALCURRUCÉN y 4º de la divisa hermana de EL CORTIJILLO, desiguales de presentación, con el inválido 3º sin trapío; mansos y descastados excepto 1º. ANTONIO FERRERA: ovación; silencio. DIEGO URDIALES. silencio; ovación tras dos avisos. GINÉS MARÍN. silencio; silencio. Plaza de Las Ventas, 7 de junio. 25ª de Feria. Casi lleno.

CRÓNICA DEL FESTEJO ANTERIOR

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (2)    No(0)

+
0 comentarios