'La duda': ¿Hacia Belén va una burra...?

Primero fue novela, luego tuvo su adaptación cinematográfica protagonizada por Meryl Streep y Philip Seymour Hoffman, y ahora se estrena en español en forma de adaptación teatral. Hablamos de ‘La duda’, escrita en 2004 por John Patrick Shanley, una obra ganadora del Premio Pulitzer, el Premio Tony y el Premio del Círculo de Críticos de Nueva York. El montaje está dirigido por Darío Facal (¡Cómo no recordar sus estupendos montajes en Las amistades peligrosas, El burlador de Sevilla o Amor de Don Perlimplín con Belisa en su jardín!). Y con un trabajo actoral que roza la perfección tanto de Carmen Conesa y Ernesto Arias, como de Marta Wall e Ileana Wilson.

Visto lo visto en escena (un trabajo de dirección y actoral espléndidos; una escenografía austera, creada por Thomas Schulz, y una música, un vestuario y una iluminación ajustadísimas que realzan la tensión intelectual del tema tratado…), es de suponer que muy pronto habrá distribuidores y exhibidores dispuestos a rescatar este montaje para escenarios de toda España, pero lo cierto es que hoy por hoy solo puede verse este fin de semana en el Teatro Galileo de Madrid.

El tema de ‘La duda’ no puede ser, desgraciadamente, de mayor actualidad, un hipotético caso de abuso a menores en un colegio católico estadounidense, pero con los flecos suficientes como para que el tema -de un indudable calado ético y moral-, esté envuelto en los claroscuros necesarios como para dejar que sea el propio espectador quien se esfuerce en “atar cabos” para llegar a una conclusión propia.

El autor sitúa la historia en un colegio de corte tradicional enclavado en el barrio neoyorkino del Bronx, en el otoño de 1964, un año después del asesinato de Jhon F. Kennedy, y en plena efervescencia doctrinal en el seno de la Iglesia, profundamente conmocionado por los postulados progresistas del Concilio Vaticano II.

La directora del colegio es la Hermana Aloysius (magistral Carmen Conesa), una mujer dura, implacable, sarcástica y temida por la comunidad educativa, que cree haber encontrado la ocasión perfecta para poner en marcha una especie de cruzada contra el Padre Flynn (estupendo también Ernesto Arias), tan osado en sus sermones como en su actitud de modernizar y acercar la liturgia a los chicos del colegio. A la directora le parece tan grave que el cura use el bolígrafo en lugar de la tradicional pluma estilográfica, como que intente incluir en la fiesta de Navidad villancicos Hacia Belén va una burra, junto a otros de corte tradicional.

La Hermana James (interpretada por una fresca e inocente Marta Wall), es una brillante y joven profesora que, a pesar de ser una ferviente admiradora de la línea aperturista del párroco, quiere también complacer a su directora y levanta las primeras sospechas del posible abuso del eclesiástico con un alumno (12 años, el único alumno negro del colegio…), con graves problemas familiares y de integración en la comunidad educativa.

Ileana Wilson encarna a la Madre del alumno y, en su corto papel, después de ser llamada por la directora para contrastar algunos extremos de la personalidad de su hijo, demuestra en un tenso “rifirrafe” con la monja, que es también una gran actriz.

El montaje, en definitiva, es tan interesante por la hondura de sus diálogos y de los problemas morales que plantea (la naturaleza de la relación entre alumno y profesor, la envidia, la arbitrariedad, la insidia, la calumnia, la sospecha infundada e intencionadamente alimentada por voces interesadas…), como por la soberbia interpretación de los cuatro actores en escena, que alcanza su mayor nivel en ese tremendo enfrentamiento entre la Hermana Aloysius y el Padre Flynn que, por sí mismo, ya justificaría que cualquier espectador no dudase en acudir a ver la función.

Y, además, hay que alabar la osadía de un joven director, Darío Facal, al sorprender una vez más con un montaje que nada tiene que ver con sus anteriores trabajos, y que vuelve a abordar con seriedad y rigor la puesta en escena de un texto vigoroso, que se adentra con palabras y situaciones cotidianas y sencillas en aspectos muy profundos de las relaciones entre los seres humanos. Vuelve Facal a demostrar que estamos ante una de las figuras más interesantes de la dramaturgia y la dirección del teatro español.

‘La duda’

Texto: John Patrick Shanley

Dirección: Darío Facal

Intérpretes: Carmen Conesa, Ernesto Arias, Marta Wall e Ileana Wilson

Iluminación: Manolo Ramírez

Música: Room 603

Vestuario: Elena Gijón

Ayudante de dirección: Javier L. Patiño

Teatro Galileo, Madrid

Hasta el 11 de septiembre de 2017