Cómo tramitar la visa para niños antes de viajar a Estados Unidos

Cómo tramitar la visa para niños antes de viajar a Estados Unidos es una de las informaciones más demandadas esta primavera en España. Las reservas de vuelos y de hoteles se están produciendo por encima de la media y 2022 va camino de convertirse en el “año del desquite”.

Han acabado las restricciones de movilidad y las prohibiciones de salir al extranjero o de entrar en ciertos países. Han sido dos años de presión para los “espíritus inquietos” deseosos de ver mundo.

La diferencia que este año puede producirse es que, si en el pasado los viajes a EE. UU. los hacían ejecutivos de negocios, grupos de amigos y parejas sin hijos, este verano puede haber un aumento del turismo familiar.

La visa de los niños

Tan importante como el billete de avión y la reserva del hotel es tener en regla la visa de viaje de los niños. Es el permiso para entrar en el país. La mayoría de los turistas extranjeros están obligados a tener una visa de “no inmigrante” y los más pequeños de la familia no están exentos de esta visa americana, que necesitarán tener antes de partir de su propio país de origen.

Los niños con cualquiera de estas nacionalidades, entre otras, deben tener su visa americana en regla: Uruguay, República Dominicana, Perú, México, Guatemala, Ecuador, Costa Rica, Colombia, Brasil y Argentina.

Si el motivo del viaje a los Estados Unidos es alguno de los listados a continuación, debe solicitar una visa a americana de no inmigrante B1/B2 o de turista: turismo, negocios, tratamiento médico y visita a familiares y amigos.

Los requisitos de la visa para niños

Al tramitar la visa americana para niños, menores de edad o bebés, se considera solicitante al niño que recibirá la visa, aunque realice la solicitud un padre o tutor legal.

Será necesario contar con los siguientes requisitos: pasaporte, con una vigencia remanente de al menos seis meses después de la fecha estimada de viaje; el solicitante (el niño) debe tener entre cero y 14 años; debe tener residencia en el país desde el cual se hace la solicitud. Los padres o tutores legales del solicitante deben tener residencia legal en el país desde el que se solicita y al menos uno de ellos debe de tener una visa americana válida, o es elegible para viajar a los Estados Unidos con un ESTA.

El ESTA (siglas de Electronic System for Travel Authorization) es el Sistema Electrónico de Autorización de Viaje. No es un visado ni puede sustituirlo. Pero es obligatorio para todos los viajeros que lleguen por avión o barco a los Estados Unidos, aunque sea sólo para hacer escala. Únicamente los viajeros que estén en posesión de un visado o un pasaporte estadounidense no tienen obligación de solicitarlo. El ESTA es obligatorio para niños y bebés.

Los niños nacidos en el extranjero de padre o madre estadounidense pueden tener una reclamación de ciudadanía a través del proceso de Reporte Consular de Nacimiento en el Extranjero. Los menores de edad con una posible reclamación a la ciudadanía son inelegibles para una visa hasta que se tome una determinación final en su caso.

Tramitación de la visa para niños

Los solicitantes de una visa estadounidense, incluso menores de edad, deben seguir los siguientes pasos para tramitar la solicitud:

Primero, rellenar el formulario de solicitud de visa. Se trata del formulario DS-160, con los datos personales y pasaporte del menor, así como sus planes de viaje.

Segundo, pago de la tasa de la solicitud (MRV).

Tercero, agendar una cita para la entrevista en la embajada o consulado y, si es necesario, CAS (en países como Colombia, México, Argentina y República Dominicana los solicitantes de visa deberán presentarse para la toma de huellas digitales y de foto en un Centro de Atención al Solicitante). La visita al CAS será previa a la entrevista en la embajada.

Cuarto, la entrevista consular en la embajada o consulado de Estados Unidos. No es necesaria la presencia del niño en la cita en la embajada o consulado para la entrevista consular. Pero al menos uno de los padres biológicos o tutores legales sí debe de asistir a la entrevista en la Sección Consular. En caso de que los padres biológicos del niño estén divorciados o separados, la persona que tiene la custodia legal del menor debe acompañar al niño en esta cita.

Quinto, recuperar el pasaporte con la visa.

Documentación para la visa

Aunque en páginas web especializadas como visab1b2.com pueden encargarse de todos los trámites, conviene saber qué documentación es necesaria para solicitar y obtener la visa.

La web visab1b2.com se encarga de agendar la cita para solicitar la visa. El día de la cita en el CAS (Centro de Atención al Solicitante) o en la embajada de Estados Unidos, el solicitante deberá contar con pasaportes en vigor del niño (debe disponer de hojas disponibles) y de los padres, incluyendo aquellos con visas americanas previas vigentes o vencidas.

Hay que llevar a la cita la identificación legal del acompañante (pasaporte, cédula de identidad, licencia de conducir); recibo de pago de la tasa de solicitud de visa MRV expedido por la entidad bancaria correspondiente; hoja de confirmación del formulario DS-160 de solicitud impresa; certificado de nacimiento del menor; copia del acta de nacimiento del menor; copia de al menos una de las visas vigentes de los padres, e itinerario de viaje con los padres o carta de permiso, especificando los detalles del viaje del menor por su cuenta, junto con los datos de los acompañantes.

Por último, llevar dos fotografías del menor a color tamaño 5x5 cm, con fondo blanco, en la que la frente y las orejas sean claramente visibles y visa anterior (en caso de que aplique).

En casos de padres separados o divorciados, se debe justificar la ausencia y disponer de los documentos que acrediten la custodia legal del menor.

Los documentos jurídicos de custodia del menor deben llevarse a la entrevista (en caso de estar disponibles). En caso de desconocer el paradero del padre o madre del menor, igualmente se puede otorgar la visa americana para el niño.

No sólo por la comida

Estudios realizados por los especialistas del sector turístico aseguran que cuatro de cada diez viajeros españoles (40%) deciden cuál va a ser su próximo destino en función de la calidad de la comida de los lugares a los que se plantean que podrían o querrían ir. Este no es el caso de los Estados Unidos, sin embargo, porque sus principales atractivos son la grandiosidad de sus ciudades y paisajes, la impresionante altura de sus edificios, la afabilidad de los estadounidenses y el hecho no menor de “sentirse como en una película”.

Hay un efecto psicológico de curiosidad por comprobar, “in situ”, que las calles, avenidas y entornos naturales, que vemos miles de veces en los informativos y en las principales películas de cine y series de televisión, son realmente como las vemos en TV y en la gran pantalla. ¿Quién no conoce la Casa Blanca, las costas de California o el Cañón del Colorado, por ejemplo? Y,

especialmente, ¿quién no reconoce Central Park, la Estatua de la Libertad o el legendario escaparate de la joyería Tiffany?

Parques temáticos para los niños

Estados Unidos es la “cuna” de los parques temáticos, tal y como los concebimos desde el siglo pasado: Walt Disney World Orlando (Florida), Universal Studios Orlando (Florida), Warner Bros Los Ángeles (California), el Centro Espacial Kennedy, de la NASA, en Cabo Cañaveral (Florida); SeaWorld Orlando (Florida), Universal Studios Hollywood (Los Ángeles, California), Legoland (Florida)…

Pero hay dos curiosidades dignas de mención. Primera, que con anterioridad a los parques temáticos se construían parque de atracciones, y los más antiguos del mundo están en Europa y aparecieron desde el siglo XVI. Y segundo, que el más antiguo de los Estados Unidos fue creado en 1846. Es el parque de atracciones Lake Compounce, a unas dos horas en coche de la ciudad de Nueva York. Tiene una de las mejores montañas rusas del mundo y el mayor parque acuático de Connecticut. Y es propiedad de la empresa española “Parques Reunidos”, propietaria del Parque de Atracciones de Madrid.