El precio de la vivienda siguió en barrena en 2011, con una caída del 11,2%

La caída interanual del precio de la vivienda libre registrada en el cuarto trimestre del año pasado se ha ampliado en casi cuatro puntos respecto a la experimentada en el tercer trimestre de 2011, cuando los precios bajaron un 7,4%.

De esta forma, ya son quince los trimestres consecutivos en los que los precios de la vivienda presentan tasas interanuales negativas. El precio de la vivienda comenzó a caer en el segundo trimestre de 2008 (-0,3%) y desde entonces la tendencia no se ha revertido. Al final de 2008, los precios caían ya un 5,4%, en 2009 lo hizo un 4,3% y un 1,9% en 2010, por lo que la caída acumulada es ya del 21,9%, según el INE. Según la tasadora Tinsa, esa caída alcanza ya el 27% desde 2007.

En los últimos cuatro trimestres, correspondientes todos a 2011, el precio de la vivienda ha ido profundizando su corrección, con descensos del 4,1% en el primer trimestre, del 6,8% en el segundo, del 7,4% en el tercero y del 11,2% en el cuarto. Estos recortes interanuales de los precios experimentados en el cuarto tanto en las viviendas nuevas como usadas son los más pronunciados desde que se inició la serie.


En todas las regiones
En tasa interanual, todas las comunidades autónomas bajaron los precios. Las mayores correcciones de precios en valores interanuales se registraron en Madrid (-15,7%), Cataluña (-14,3%), La Rioja y Melilla (-14,2% en ambos casos), Ceuta (-12,9%), Aragón (-12,5%) y País Vasco (-12,2%).

En torno y por debajo de la media nacional se situaron los precios en Cantabria (-11,6%), Navarra (-10,9%), Asturias (-10,5%), Castilla y León (-10,5%), Baleares (-9,8%), Comunidad Valenciana (-9,8%), Castilla-La Mancha (-8,8%), Andalucía (-8,4%), Extremadura (-8%), Galicia (-7,9%), Canarias (-7,7%) y Murcia (-7,1%).

El IPV que publica Estadística es compatible con las exigencias de Eurostat y complementa al que publica trimestralmente el Ministerio de Fomento. Entre sus objetivos se encuentra el de servir de elemento de comparación entre los Estados miembros en lo referente a los precios de la vivienda.