Rinoplastia: La armonía como reto

Se trata de una parte de nuestra cara que define nuestra personalidad y carácter, que otorga armonía o que, en el peor de los casos, la arrebata por completo.

“Es la operación estética más demandada y también la más difícil”, asegura el Doctor Salvador Rodríguez-Camps, especialista en Cirugía Plástica, Estética y Reconstructiva por la Universitat de València, “pero también es una de las más fascinantes, ya que un paciente con rinoplastia es siempre un reto para el cirujano plástico”.

Este profesional, Jefe de la Unidad de Cirugía Plástica y Estética del Hospital Universitario Casa de Salud de Valencia ha sido galardonado varias veces por su profesionalidad (con la Medalla de Oro Europea al Mérito en el trabajo y la Estrella de Oro a la Excelencia Profesional) y sabe muy bien de lo que habla, ya que por sus manos han pasado numerosos casos en los que ha podido demostrar su valía y que podemos ver en su página web.

“Para mí, un cirujano plástico es como un restaurador de fachadas”, confiesa el afamado peluquero Tono Sanmartín. Sabe de lo que habla. Nada contento con la forma de su nariz, acudió a un cirujano para poder operársela, pero los resultados no fueron óptimos.

“Pertenezco al mundo de la imagen y soy muy consciente de que tengo un juez muy duro, el espejo. Tengo muy estudiado mi rostro y buscaba normalizar el tamaño y la forma de mi nariz con el resto de los elementos de mi cara”, apunta Sanmartín.

Para poder alcanzar su sueño, decidió pasar por quirófano por segunda vez, pero esta vez confió en el Doctor Salvador Rodríguez-Camps. “Coincidimos en muchos aspectos y tenía en mente el mismo concepto que yo, eso me hizo confiar al 100%. Le conozco bien, he enviado clientas a su Clínica muy recomendadas porque hace un seguimiento total de todo el proceso y, además, es partidario de hacer sugerencias y buscar lo mejor para cada caso. No hay médico más respetuoso con el cuerpo que él”, manifiesta el peluquero.

La técnica usada en reconstruir la nariz de Tono Sanmartín, conocida como punta nasal difícil, es una de sus innovaciones y pone sobre la mesa que la dificultad no está en el tamaño, sino en buscar el resultado esperado; un vértice nasal suave, tanto a la vista como al tacto, sin picos ni aristas en personas que antes tenían puntas rotas, asimétricas, distorsionadas y globulosas.

“El Doctor es muy estricto con la belleza y nunca permite que la armonía quede por debajo de las obsesiones de cualquier paciente. Quien entra en su clínica sabe que va a recibir el consejo de un profesional magnífico”, declara Sanmartín.

Si queréis conocer un poco más de cerca el trabajo del Doctor Salvador Rodríguez-Camps, podéis visitar su página web, donde podéis consultar sus casos de éxito y su magnífica trayectoria profesional en la medicina.