Escena de 'Los pálidos' (Foto: Luz Soria)

Crítica de la obra de teatro 'Los pálidos': lucha de poder en el plató

https://www.linkedin.com/in/josé-miguel-vila-8642271a/

viernes 24 de febrero de 2023, 14:13h

Lucía Carballal (Las bárbaras, La resistencia, Una vida americana…), debuta como directora con un texto propio, ‘Los pálidos’, que el Centro Dramático Nacional exhibe hasta finales de marzo próximo en la Sala Francisco Nieva del Teatro Valle-Inclán. Se trata de una ficción, en cierto modo autorreferencial porque la joven dramaturga es también guionista de Televisión, en la que dos generaciones se enfrentan a partir de la emisión de un guion con un final políticamente incorrecto con el que una serie de Televisión orientada al joven público femenino, acaba la temporada.

Conflictos de poder, relaciones intergeneracionales, visiones enfrentadas entre el hombre de ayer y las mujeres de hoy son los temas que sobrevuelan en un drama que protagoniza un elenco de ensueño: Israel Elejalde, Natalia Huarte, Manuela Paso, Miki Esparbé y Alba Planas.

Una sala de redacción de un equipo de guionistas, escenografía diseñada por Alessio Meloni (espacios amplios, cómodos, sin lugares concretos asignados para los miembros del equipo, una gran pantalla de fondo…), es el lugar donde se desarrollan los hechos que van a vivir los personajes de la propuesta de Carballal, que ha contado también con un magnífico equipo artístico: Paloma Parra (diseño de iluminación), Sandra Espinosa (vestuario), Sandra Vicente (diseño de sonido) y Bárbara Sánchez Palomero (videoescena y fotografía).

Jacobo (Elejalde), cincuentón y jefe del equipo de guionistas, triunfador durante varios lustros, acaba de cometer un error de cálculo difícilmente reorientable: la jovencísima protagonista de una serie de éxito, embarazada, abandona un equipo de voleibol de talla mundial porque decide primar su maternidad. El error pone en la cuerda floja al líder del grupo, frente a María (Natalia Huarte), joven guionista sin experiencia reclutada por el propio Jacobo, después de haber sido profesora de la hija del guionista durante varios años, y que se venía dedicando también a sacar adelante una pequeña librería de barrio. La otra mujer del equipo es Gloria (Manuela Paso), que en los últimos 15 años ha sido el sostén profesional y emocional de Jacobo que, sin embargo, ahora prescinde de ella como primera víctima del traspié del final de la serie, que no ha gustado nada a feministas radicales y jovencitas desorientadas, que son las principales consumidoras del producto televisivo en cuestión. De nada le vale a Gloria su experiencia y profesionalidad frente a la vehemencia y la ideologización de María que, al final, va a ser la ganadora de la contienda que va a destronar también a Jacobo. Completan el reparto Max (Miki Esparbé), hermano de Jacobo, forma también parte del equipo de guionistas y acabará igualmente enfrentado a su hermano, y Miranda (Alba Planas), hija de Jacobo, estudiante de Empresariales, y prototipo de las jóvenes seguidoras de la serie.

Quizás sea el epílogo final el momento más emotivo de la propuesta, en donde las ideologías, la lucha por alcanzar el liderazgo del equipo de ‘Los pálidos’ y las enormes diferencias de criterio respecto al curso que debe tomar la serie, pasan a segundo término tras emerger las verdaderas causas que incidieron en el distanciamiento entre Jacobo y María. Enormes Elejalde, Huarte y Paso, también excelentemente secundados por Esparbé y Planas.