Crítica de la obra de teatro 'No soy tu gitana': activismo gitano entre risas, palmas y tangos

Silvia Agüero es gitana, activista, escritora y -¿por qué no?-, también actriz en ‘No soy tu gitana’, una propuesta propia y de Nüll García, también directora del montaje. En Teatro del Barrio desde hace algún tiempo –las representaciones pasan ya de 35-, hoy terminan las que han tenido lugar en este mes de octubre. Pero hay más para el año que viene (Barcelona, Vitoria…), y me atrevo a asegurar que tampoco las de octubre serán las últimas en Teatro del Barrio.

En la presentación del montaje se indica que ‘No soy tu gitana’ “no es un monólogo, sino un diálogo teatral sin pretensiones de deconstruir a nadie”. No le falta razón porque el montaje bien podría ser una conferencia teatralizada cuyo objetivo es el de hacer saltar por los aires tanto los prejuicios como los estereotipos que la sociedad paya-es decir, la de los no gitanos, la nuestra-, ha levantado históricamente en torno a lo gitano y a los gitanos. O, mejor aún y siendo más concreto, sobre la mujer gitana. De todo eso y mucho más hay en ‘No soy tu gitana’.

Cuando el público va ocupando sus butacas encuentra ya a una mujer gitana moviéndose con soltura y desenfado sobre un escenario atravesado de punta a punta por varias cuerdas de colgar la ropa. En ellas están varios chales que luego utilizará la actriz representando a la Carmen de Merimée, una lámina de La buenaventura, de Caravaggio y varios documentos escritos. Se trata de alguna página de La gitanilla de Cervantes y un par de leyes españolas, una de los Reyes Católicos y otra del siglo XVIII, de la época del Marqués de la Ensenada, en la que se perseguía frontalmente y sin ningún tipo de ambages a la población gitana. Todos ellos salen a colación en el diálogo abierto y permanente con el público que mantiene Silvia Agüero durante los 75 minutos de duración del montaje.

-“¿…Yo también estoy gorda? ¿Sí, de verdad?...¿Y qué tal, qué habéis comío? Es que esta preocupación es mu gitana. Lo de preguntar por la comida es gitanísimo Está en el top ten de la gitanidad…”. Con un gran sentido del humor, siempre divertida, desinhibida y fresca, Silvia Agüero dialoga con los espectadores, les formula preguntas, les hace cantar con ella, acompañar con palmas el ritmo de las canciones y, al final, hasta hace bajar a una docena larga de espectadores al mismo escenario. Pero todo eso no es más que la forma de hacer que todo el mundo empatice con la terrible situación que ha vivido -y, en cierto modo, sigue viviendo…-, la población gitana en España. Hoy tampoco estamos libres de contribuir a la marginación y al racismo que aún sigue padeciendo el gitano en general, y la mujer gitana en particular.

Y, al final, la propuesta de Silvia Agüero y Nüll García, absolutamente alejada de todo tipo de academicismo, consigue interiorizar en el público los efectos que busca, hacerle caer en la cuenta de que en sus actitudes cotidianas (“¡no pierdas de vista tu cartera, que por ahí andan varias gitanas…!”), y en las más profundas, aún quedan entre nosotros rasgos de racismo contra la población gitana. Y, el que diga lo contrario, que tire la primera piedra.

‘No soy tu gitana’

Dramaturgia: Silvia Agüero y Nüll García
Dirección: Nüll García
Intérprete: Silvia Agüero

Trabajo actoral: Pamela Palenciano

Consultoría y traducción: Nicolás Jiménez
Diseño de escenografía: Aylin Vera Ramos (Sawustudio)
Diseño de Iluminación: Beatriz Franco
Diseño de Vestuario: Almudena Bautista
Producción artística: Ana Belén Santiago
Producción ejecutiva: Lucía Rico
Dirección técnica: Antonio Sánchez
Comunicación: Paloma Fidalgo
Fotografía: Laura Ortega
Video promocional: Mi moto alpina
Diseño de cartel: Jacobo Gavira

Una producción de Teatro del Barrio en colaboración con Pretendemos Gitanizar el Mundo

Teatro del Barrio, Madrid

Del 13 al 16 de octubre de 2022