La autoridad monetaria estadounidense redujo los tipos en un cuarto de punto porcentual, en una votación dividida dentro del comité encargado de tomar la decisión. Algunos miembros defendieron mantener el nivel actual, mientras otro pidió un recorte mayor, reflejando incertidumbre sobre la inflación y el mercado laboral.
Tras la decisión, el organismo indicó que probablemente hará una pausa para evaluar los datos que sigan llegando, ya que la inflación sigue por encima del objetivo y la creación de empleo muestra señales claras de debilitamiento. Las proyecciones apuntan a un solo recorte adicional en 2026, con crecimiento moderado y desempleo estable. Estas previsiones se elaboraron sin informes oficiales recientes, que mostraban leves aumentos en desempleo e inflación, influenciados por mayores costes de importación y un prolongado cierre gubernamental.
En su mensaje, el presidente de la Reserva Federal afirmó que los tipos actuales están cerca del rango neutral y que, tras los recortes acumulados en el último año, la institución puede observar con cautela la respuesta de la economía. El comité reiteró que las decisiones se tomarán reunión por reunión, en un contexto político sensible y con presiones para ajustes más profundos. Además, varios responsables no esperan más recortes durante el año 2026, lo que sugiere un proceso gradual y con mucha cautela.