Los profesionales de la hostelería de la península a la espera de trabajar en Baleares

A pesar de la actual pandemia, las Islas Baleares ya está preparándose para acoger a turistas de nacionalidades diversas, como alemanes, británicos o franceses, tanto en sus hoteles como restaurantes. Dada la carencia de mano de obra en el archipiélago, muchos de estos negocios recurrirán a trabajadores de la península para suplir sus plantillas.

A esto se añade que el Gobierno de España tiene previsto relajar las medidas de seguridad una vez que expire el Estado de Alarma. Por lo tanto, se prevé que la oleada de turistas nacionales a las Islas Baleares incremente la demanda de nuevos profesionales de este gremio.

Tanto es así que, con ocasión del inicio de la temporada alta de verano en el archipiélago balear, las navieras suelen ofrecer precios rebajados a todos aquellos que se trasladan a las islas en ferry con el propósito de trabajar en la hostelería durante el periodo estival. Desde luego, con estas bonificaciones puestas en marcha por las navieras, se logra incentivar el desplazamiento de los trabajadores a las Baleares para atender las necesidades de este sector.

Lo cierto es que casi todos tenemos en mente la idea del ferry que nos traslada a nuestro lugar de vacaciones para disfrutar de unos días de asueto entre naturaleza y playas. No obstante, para muchos se trata de un medio de locomoción fundamental para desplazarse hasta su puesto de trabajo. Aunque apenas reparamos en este detalle, son ellos –los trabajadores de la hostelería– quienes hacen posible que nuestras vacaciones discurran de la manera más placentera posible.

No podemos olvidar que la hostelería en las islas Baleares es un sector fundamental para la economía del archipiélago, a pesar de que este gremio se ha visto especialmente perjudicado con la COVID-19 dadas las continuas restricciones que afectan de pleno a su actividad. La última de ellas es la clausura, durante al menos dos semanas, del interior de bares y restaurantes de Mallorca pues tras la Semana Santa se ha apreciado un repunte en los contagios. No obstante, la previsión es que el avance en la vacunación y las medidas impuestas surtan efecto.

Además, una de las grandes bazas de viajar en ferry es que podemos embarcar nuestro coche y, por lo tanto, contar con las ventajas de autonomía por la isla que este nos ofrece. Por descontado, la posibilidad de trasladar todas las maletas y enseres que consideremos necesarios para nuestra estancia en el archipiélago –que puede alargarse durante dos e incluso más meses– resulta de gran utilidad para facilitar la mudanza.