Nuevas formas de financiación para particulares

Hace tiempo que el préstamo bancario dejó de ser la única forma, junto al apoyo de amigos y familiares, que los particulares tenemos para financiar una compra o cualquier proyecto. Afortunadamente, la revolución de las comunicaciones llegó también a esto, e Internet ha facilitado el acceso online a nuevas formas de financiación para particulares, que hoy en día disponen de un amplio abanico de posibilidades.

En este artículo vamos a ofrecerte algunos mecanismos de financiación, que tienen en común que han surgido y se han popularizado en los últimos años. No es una lista exhaustiva, pero sí podrás comprobar que hay posibilidades de financiación más allá de acudir a un banco, sentarte con un gestor y rellenar complejos formularios que muchas veces no llevan a nada.

Préstamo online

Un préstamo online, como el préstamo online de Creditea, permite obtener una liquidez inmediata, con la diferencia de que no requiere una relación con la entidad bancaria, ni pasar por los trámites a veces farragosos antes de obtener la tarjeta de crédito o solicitar un préstamo ante una entidad bancaria. Se trata de préstamos obtenidos de manera ágil, rápida y sencilla. Son préstamos seguros, pero más rápidos y fáciles de obtener que los créditos bancarios.

Por eso, esta fórmula de financiación se usa cada vez más para hacer frente a gastos imprevistos. Por ejemplo, realizar un arreglo urgente al coche, hacer la compra de regalos navideños o pagar un gasto extraordinario del dentista. La razón es obvia: se obtienen de manera rápida y tienen un límite de cantidad adecuado para ese tipo de gastos. La agilidad está garantizada porque la tramitación es online, y suelen ofrecer una calculadora para calcular la cuota mensual de devolución.

Crodwfunding

Se trata de una de las fórmulas más populares porque ha servido para que se hagan realidad ideas creativas que de otra manera quizá no hubieran encontrado una financiación "clásica". El crowdfunding o micromecenazgo es una red de financiación colectiva que permite dar apoyo económico a un proyecto, generalmente vía online. A cambio de este apoyo, suelen ofrecerse recompensas que tienen un mayor valor cuanto mayor es la aportación.

En realidad, el elemento diferencial lo aporta Internet y la capacidad de difusión pública de una idea, que permite prescindir de la labor de intermediación que normalmente realizan las entidades financieras. Si alcanza un número de simpatizantes suficiente, la persona que busca financiación podrá realizar su proyecto y entregará las recompensas; si no, devolverá lo obtenido. Por eso, el micromecenazgo suele usarse para lanzar un disco, apoyos solidarios, campañas políticas y un rango amplísimo de propósitos.

Microcréditos

A diferencia del micromecenazgo, que implica una financiación participativa cercana al altruismo, el microcrédito es un crédito pero muy pequeño, y generalmente realizado a prestatarios que no tienen acceso a otras fórmulas de financiación. El objetivo suele ser financiar iniciativas empresariales de personas con poca capacidad económica.

Crowdlending

Por último, el crowdlending son préstamos entre particulares facilitados por una plataforma que los pone en contacto. Suele tratarse de microcréditos, con la particularidad de que gracias a las nuevas formas de comunicación, hoy resulta más fácil poner en contacto a las personas que necesitan un préstamo con aquellas interesadas en ofrecerlo, sin recurrir a la intermediación de una entidad financiera.