Una mujer de 68 años ha tenido que ser rescatada por Salvamento Marítimo en Manilva tras no poder volver a la orilla con su tabla de paddle surf. El operativo se extendió hasta casi las 2 de la madrugada.
Practicar paddle surf está cada vez más de moda, especialmente en estos días de vacaciones. Pero aunque parece un deporte fácil e inofensivo para disfrutar de la playa en verano, se puede convertir en una auténtica pesadilla. Es lo que le ocurrió a una mujer en Manilva (Málaga) la tarde de este jueves.
Según han informado medios locales como 'Diario Sur', la mujer salió con un grupo de personas a hacer paddle surf pero se alejó demasiado y ante las condiciones de viento y marejada, no podía regresar a la orilla.

Horas de búsqueda
Algunos compañeros intentaron rescatarla, pero sin éxito, por lo que volvieron a tierra y dieron el primer aviso sobre las 22:20 horas, pero no fue hasta la 1:40 de la madrugada cuando la mujer pudo ser rescatada.
El primer aviso alertó de que una mujer se encontraba a unos 800 metros de la playa en la tabla de paddle surf y no podía volver. Se inició rápidamente un operativo pero no fue localizada hasta casi las 2 de la mañana.
Los rescatistas la encontraron a unas 3 millas del Puerto Deportivo de la Duquesa con síntomas de hipotermia y agotamiento, pero consciente y sobre la tabla.
Recomendaciones para hacer paddle surf de forma segura
No es la primera vez que Salvamento Marítimo rescata a alguien que hacía paddle surf y no podía regresar a la orilla.
Incluso hace unos años, también en Málaga, 2 jóvenes desaparecieron tras meterse al mar con su tabla de paddle surf en plena alerta por viento. Solo apareció la tabla a 25 kilómetros de donde se les vio por última vez, pero sus cuerpos no han aparecido.
El peligro no es el paddle surf en sí mismo, sino cometer imprudencias. Alejarse mucho de la orilla, no prestar atención al tiempo, no hacer un curso de iniciación...
Como explicamos en un artículo anterior, para evitar sustos con el paddle surf es necesario hacer lo siguiente:
Hacer un curso de iniciación: aunque es un deporte fácil en apariencia, un experto enseñará las claves básicas para remar y sobre cómo actuar en caso de emergencia.
- Comprobar la información meteorológica: evitar meterse cuando hay alertas o si el mar está revuelto
- Informarse del viento: saber la dirección del viento y su potencia es importante para remar en las condiciones más seguras: es mejor no empezar a remar a favor de viento, así la vuelta será menos cansada
- Es obligatorio llevar chaleco o algún dispositivo de flotabilidad, en especial cuando no se es un experto. Y si se puede, llevar el móvil para poder alertar en caso de complicaciones.
- No soltar la tabla en caso de quedarse a la deriva, tener siempre el leash puesto.

Como todos los deportes náuticos, la mejor forma de hacerlo de forma segura es hacer un curso o clase para tener las nociones básicas.
El viento y las corrientes pueden jugar malas pasadas y es más fácil de lo que parece que la tabla quede a la deriva y no se pueda volver remando ante la fuerza del oleaje o el viento. Antes de echarse al agua y volver nadando por miedo, lo mejor es quedarse encima de la tabla con el leash atado y agitar el remo de un lado a otro para que los socorristas entiendan que hay un problema y acudan al rescate.