A Emilio Botín le sobran 25.297 millones de euros de capital
Los españoles rescatan a sus banqueros
martes 02 de octubre de 2012, 10:36h
Con la excusa de que el sistema financiero es lo que otorga la
estabilidad a un país, el Gobierno español recurrirá al fondo europeo
Mede -Mecanismo de Estabilidad Financiera- para sanear a siete bancos,
entre ellos, la Bankia de Rodrigo Rato. De los 83.325 millones que
España aporta a este instrumento, la recapitalización de estas entidades
financieras con problemas se comerá 53.745 millones de euros.
Nuevamente, habrá sido el Estado, con la recaudación de impuestos de los
españoles, quienes habrá salvado la mala gestión de algunos políticos y
banqueros que gestionaron cajas de ahorros y bancos.
El informe Oliver Wyman, que la pasada semana hizo público el Gobierno,
pone de relieve dos cosas: que la banca española no estaba tan bien como
se vaticinaba cuando otro gran banco, el estadounidense Lehman Brother
se iba a pique en septiembre de 2008 y desataba la caída de los grandes
colosos financieros del mundo sin apenas afectar al sistema financiero
español. Y que contrariamente a lo que podía pensar, el pato del
problema y de la necesidad de capitalización lo asumirían los bolsillos
de los españoles y de ninguna forma, el propio sector financiero a
través del fondo europeo Mede (Mecanismo de Estabilización Financiera).
Este
fondo, que fue creado a comienzos de este año, exactamente el 2 de
febrero, cuenta con un total de 700.000 millones de euros aportados por
los 17 miembros de la Europa del euro, de los cuales parte se recibieron
en forma de avales y parte en metálico. La dotación española ascendió a
83.325 millones de euros, de los que 73.800 millones de euros fueron
avales y 9.500 millones, dinero líquido. De este montante, la banca
española se comerá 53.745 millones de euros, según reflejan los test de
estrés a los que se han sometido a las entidades españolas después de
que Europa haya dado su visto bueno.
Con ello, se observa que
España se comerá una gran porción de lo que aportó. Se erigió como el
cuarto país que más contribución realizó al Mede, por detrás de
Alemania, Francia e Italia, y también como el cuarto, en la decisión de
voto, con 11,9% de peso. Angela Merkel con 190.024 millones y el 27,14%
en la toma de decisiones asumía la voz cantante, tras Francia con
142.701 millones de euros y un 20% de participación e Italia con 125.395
millones y un 17,9%. Gran Bretaña quedaba excluida por no estar
integrada dentro del euro.
España cuenta hasta con 100.000
millones de euros de este fondo para asumir el rescate financiero y tras
el visto bueno de los tribunales alemanes que posibilitaron a Alemania a
realizar el desembolso comprometido, podrá utilizar lo que necesita.
Según el ejecutivo comunitario, "la recapitalización de un primer grupo
de bancos está prevista para noviembre". Pero la pregunta es de dónde
obtendrán los gobiernos europeos ese dinero y la respuesta es sencilla:
será un gasto más de los presupuestos generales de los Estados, como lo
son las pensiones o los intereses de la deuda y para conseguirlo hace
falta recaudarlo, generalmente vía impuestos y tasas, no hay otra
opción. A los europeos, y más a los españoles, les tocará apretarse de
nuevo el cinturón.
Los 53.745 millones de euros que siete grupos
bancarios necesitan -Bankia, Catalunya Bank, Novacaixa, Banco de
Valencia, Popular, BMN e Ibercaja- podrían haber sido aportados por los
bancos que están saneados en un ejercicio de corresponsabilidad, como
ocurrió cuando el Gran Crack de 1929. De hecho, con el sobrante de
capital de únicamente el Grupo Santander, el más solvente, se podría
haber asumido la mitad de las necesidades del sector. A Emilio Botín le
sobran 25.297 millones de euros de capital en uno de los escenarios más
adversos de la economía, lo que supone más de la mitad de lo que
necesitan sus competidores.
Las provisiones que obliga a realizar
el Banco de España a la banca, cumpliendo con lo que exigía el acuerdo
mundial de Basilea I y Basilea II, se quedaron pequeñas en estas crisis,
al menos para los bancos citados pero fueron suficientes para otro
siete grupos bancarios, léase: Santander, BBVA, CaixaBank, Kutxabank,
Sabadell, Bankinter y Unicaja. Y esto demuestra una vez más, que
zapatero a tus zapatos, que los políticos gestionando cajas de ahorros
no sirven y que el dinero de todos, en manos de malos gestores es
peligroso para un país.