Oleada de indignación (y sospechas) por la ayuda arbitral al Barça frente al Atlético

Aluvión de críticas a un arbitraje pésimo, el del alemán Felix Brych, que favoreció tremendamente a un Barça que estaba siendo superado sobre el campo por un voluntarioso Atlético. 0-1 ganaban los rojiblancos cuando los de Simeone perdían a Fernando Torres por doble amarilla. Podría entrar a debate si, independientemente, esas faltas del delantero eran merecedoras de cartulina, pero en cualquier contexto de un arbitraje equilibrado, en una primera parte casi nadie expulsaría a un atacante por dos acciones aisladas. Pero sí fue el caso de ayer, partido de ida de los cuartos de final de Champions, cuando peor lo pasaba el Barça. La indignación fue tremenda, sobre todo porque las faltas de los azulgrana no recibían el mismo castigo, y Busquets hizo una acción semejante -o incluso más dura- poco después de la expulsión de Torres y no vio ningún color de tarjeta.

Eso fue la primera parte. En la segunda, el Atlético pagó el desgaste de jugar con 10 y Luis Suárez, al que muchos creen que se le debió expulsar por una polémica acción de juego, fue quien marcó, para más inri, los dos tantos del triunfo culé de la noche hasta conseguir el 2-1 final.

Torres dijo tras el partido que lamentaba el arbitraje y aseguró que es "una pena que la UEFA se preocupe de cambiar las camisetas y luego ponga un árbitro que no esté a la altura". Luego se calentó más si cabe: "Lo podíamos esperar. Cuando notas que te miden de una manera diferente es una pena".

Más calentito si cabe estuvo el técnico rojiblanco. Simeone dijo: "No puedo decir lo que pienso". Luis Enrique, por su parte, barría para casa: "Vale lo que dice el árbitro, lo demás son puntos de vista contrarios". El capitán del Atlético, Gabi, se mostró muy molesto con el arbitraje: "Hasta la roja, dominábamos el partido y el marcador. Podría habarse ahorrado la segunda amarilla y más en el minuto que era". "Es muy fácil jugar ante este equipo y más aún cuando ellos juegan con uno más, pero seguiremos trabajando para intentar pasar".

Y quien sí explotó fue el brasileño Luis Filipe, que no se cortó un pelo: "Los árbitros protegen al Barça. Hay temblores en la UEFA con que se les pueda eliminar. Todo esto es triste (...) no sé qué tienen que hacer estos señores para ser expulsados como nosotros". También acusó a la UEFA de ayudar al Barça arbitralmente además de hacerlo también con los sorteos y las bolas calientes.

Internet también un avispero contra el arbitraje recibido por el Atleti. Y las estadísticas mandaron. Por ejemplo, este dato que da para mucho: el Barcelona tiene en su poder el récord de rivales expulsados en la Champions con 30 en total, muy por encima del segundo, el Bayern de Múnich (20) y del tecero, el Arsenal (18).