Crítica de la obra de teatro 'Las hermanas de Manolete': resignación o muerte

La Sala Jardiel Poncela del Teatro Fernán Gómez acoge hasta finales de mes el montaje dirigido por Gabriel Olivares, ‘Las hermanas de Manolete’, a partir del texto de Alicia Montesquiu, que también encabeza el reparto junto a las actrices Alicia Cabrera y Ana Turpin. Las tres levantan en escena una historia sorprendente e hipnótica con base real, pero construida sobre una ficción ideada por la autora aragonesa.

‘Las hermanas de Manolete’, Manuela (intensa Alicia Montesquiu) y Remedios (graciosísima Alicia Cabrera), siempre encerradas en su casa de Córdoba, solo se deciden a salir de ella para investigar si la amante del torero, Lupe (seductora y glamourosa Ana Turpin), estaba decidida a casarse con Manolete in articulo mortis y en la misma enfermería de la plaza de Linares, donde el toro Islero empitonó mortalmente al diestro, únicamente por su gran fortuna y no por amor.

Los nombres de las mujeres que rodearon la figura del genial torero, uno de los más grandes en la historia de la tauromaquia, son efectivamente reales, pero no así la fábula trenzada espléndidamente por Alicia Montesquiu en torno a él. En tono de thriller, de auténtico cine negro que Gabriel Olivares potencia aún más haciendo que la representación sea en realidad la filmación de una película, discurre una fábula tan apasionante como inquietante. En ella se disecciona la figura de la mujer en toda una época, la de la posguerra española, en donde aparentemente no tenía ninguna importancia sobre los hechos que conforma la gran historia de un hombre como Manolete.

La realidad, sin embargo, es que todas ellas tienen un papel capital en el nacimiento, el crecimiento y la consolidación de una figura del toreo como la de Manolete que, con su personalidad adusta, y siempre con un toreo vertical y arriesgado marcó toda una época del mejor toreo en España. Y el dibujo que se muestra en escena perfila con agudeza y desgarro la situación de la mujer en la España de posguerra, que condenaba a todas ellas a la transparencia, al olvido, al ninguneo permanente.

Frecuentes interrupciones introducidas por el director del montaje (órdenes al cámara, sonidista y a las propias actrices) facilitan, además, la visión crítica del espectador con ese acercamiento y alejamiento de la historia que se cuenta. Un recurso muy empleado por el dramaturgo alemán Bertolt Brecht en sus obras con el ánimo de despertar la conciencia crítica del espectador frente a lo que sucede en escena.

El camino de la escritura dramática bien puede profundizarlo la actriz y cantante Alicia Montesquiu porque ‘Las hermanas de Manolete’, contiene todos los elementos de una escritura inteligente, fina y comprometida y eso ya es decir mucho.

Marta Guedán es la autora de la sencilla escenografía (varios espacios -cocina, habitación de hotel y plató a la vez); Mario Pinilla ha diseñado el elegante vestuario de época; Carlos Alzueta ha iluminado con precisión e intención, y Ricardo Rey ha construido el espacio sonoro, en el que no faltan coplas y tonadillas de la época.

Estupendo montaje que atrae, sorprende y deslumbra a la vez. Imperdible.

‘Las hermanas de Manolete’

Texto: Alicia Montesquiu

Dirección: Gabriel Olivares

Reparto: Alicia Montesquiu, Alicia Cabrera y Ana Turpin

Escenografía: Marta Guedán

Vestuario: Mario Pinilla

Iluminación: Carlos Alzueta

Espacio sonoro: Ricardo Rey

Ayudante de dirección: Jesús Redondo

Asesoría vocal: Yolanda Ulloa

Asesoría de movimiento: Andrés Acevedo

Fotografía cartelería: Javier Biosca

Fotografía y vídeo de escena: Nacho Peña

Diseño gráfico: Javier Biosca y Sergio Avargues

Producción: ElReló en colaboración con TeatroLAB Madrid

Producción ejecutiva: Gaspar Soria

Teatro Fernán Gómez. Sala Jardiel Poncela (Madrid)

Hasta el 30 de enero de 2022