Cada 4 de septiembre la Iglesia Católica conmemora a uno de los santos más reconocidos a nivel internacional: San Moisés, el profeta. La leyenda cuenta que Moisés fue rescatado en el río Nilo y fue criado por el faraón de Egipto en el siglo XIV A.C.
Aunque no fue educado en el cristianismo, los textos recogen que Dios llamó a Moisés. El famoso pasaje en el que la zarza ardiente que nunca se consume le habla y le ordena que libere a su pueblo, los israelitas, de la esclavitud de Egipto.
Es aquí donde ocurren las famosas 10 plagas de Egipto, pues ante la negativa del faraón a liberar al pueblo, Moisés le advierte del castigo.
Tras las abrumadoras plagas, el faraón decide liberar al pueblo de Moisés, pero se arrepiente y manda perseguirlos, momento en el que tiene lugar el famoso cruce del Mar Rojo.
Moisés utiliza a Dios para separar las aguas del mar y que su pueblo consiga pasar. Una vez todos a salvo, el mar se cierra engullendo a todos los soldados egipcios. Después, acompañó a su pueblo durante 40 años en busca de la Tierra Prometida, aunque falleció justo antes de llegar.
A Moisés se le atribuyen varios milagros como la separación de las aguas, hacer brotar agua de las rocas o lograr paliar la hambruna.
Es una figura muy conocida por su determinación y la Fé. Su vida y obra se han llevado al cine en numerosas ocasiones convirtiéndose así en un personaje del Antiguo Testamento muy destacado.
4 de septiembre: también es su santo hoy
- San Bonifacio I papa
- San Caletrico de Chartres
- San Fredaldo de Mende
- San Marcelo de Chalons-sur-Saone
- Santa Ida de Herzfeld
- Santa Irmgarda de Süchteln
- Santa Rosalía de Palermo