Cristina Dilla: "Los actores no deben meterse en política, ya hacen mucho teatro los políticos"

-¿Cual es su papel en"El Joc de la veritat"?
-Interpreto a Carmen: es la pareja de Enric (Octavi Pujades): psicóloga de profesión, una veterana que "se las sabe todas".Llevan muchos años juntos, y están cayendo en la monotonía. Por el contrario, la formada por Albet (Roger Cantos) y Joana (Miriam Tortosa) desea vivir nuevas experiencias.
-¿Y ?.
-Empieza el juego de las mentiras (para autojustificar comportamientos y media verdades, que al final son verdades). Es cierto lo que dicen algunos estudios de: caso que dijéramos siempre la verdad, sería imposible que supervivieran las parejas. Nosotros llevamos la mentira hasta el extremo, y es cuando surge el humor. Otra pregunta es: ¿no decir la verdad, es exactamente "una mentira"
-Además, juegan con el interponer el amor en las relaciones de trabajo.
--Eso es lo que da "chispa" al espectáculo: mi pareja Enric, es el jefe del otro hombre de la otra pareja, y esa "superioridad laboral" desemboca en licencias para engañar a su mujer. Entre ambas parejas, además, existe una evidente diferencia de edad.En ese tema, pienso que no es cierto lo de que "polo opuestos se atraen"...Si una pareja se conoce a fondo y es en el trabajo, hay bastantes probabilidades de que "salga bien".
-¿Cómo definiría esta comedia?
-Tiene un ritmo vertiginoso, debemos estar los cuatro actores muy compenetrados, porque en algunas ocasiones actuamos al mismo tiempo: una pareja (la que está engañando a su partenaire) y la otra...Tiene una duración apropiada: 80 minutos, y la gente se ríe mucho.
-Estando por en medio la infidelidad.
-Si, pero no crea que hacemos un "estudio sesudo" o teoría sobre ello, sino que lo planteamos de forma ligera, con los típicas malentendidos de comedia.

Tempo

-¿Es lo mismo fidelidad que lealtad?
-Le respondo como persona: es más importante la lealtad, que la fidelidad (un concepto quizá más estereotipado).
-¿Cómo ha sido la experiencia de las primeras funciones?
-De momento muy satisfactoria, a tenor de la respuesta del público en la semana y poco que llevamos. Antes hicimos una función en Sant Boi como "preestreno",aunque en un escenario bien distinto al del Gaudí, donde además tenemos el público (como en los teatros pequeños) casi al lado. Y repartido en cuatro bandas, lo que hace que estemos "desnudos", sin protección en el escenario.
-¿Eso es una ventaja o al revés, para los actores?
-A mí me gustan ambas opciones porque he actuado en todo tipo de locales. Además, cuando estuve en los espectáculos de Pepe Rubianes, lo mismo actuábamos en una sala muy grande como la del Hotel Meliá de Sitges, que en locales muy pequeños.
-¿Qué es lo más importante para una comedia?
-En general, y especialmente en ésta: el tempo y la musicalidad; de fallar ambas cosas, puedes cargarte una escena de risa... Saber dominar los silencios, conocer cuando están previstas las risas, e incluso reaccionar cuando surjan risas en un momento que no te lo esperas. Cada día es distinto.
-Desde que hizo "Las otras" en el Teatro Capitol, ¿cuál ha sido su trayectoria, o quizá ha habido un parón teatral?
-Parón no, porque he seguido haciendo teatro...Bien es cierto que con períodos que salían menos cosas y que aproveché para dedicarme a otros asuntos como una productora de cine y marketing. También me dediqué al microteatro. Y En cine he hecho últimamente una película de Marc Recha "Sin taulas a la nit", y otra titulada "La mesita del comedor", que se pasó en el Festival de Sitges.
-¿Sigue siendo televisión el refugio económico de los actores?
- ¡Ahora,no tanto!. Antes de la crisis se pagaba un sueldo muy elevado por participar en series, etc. Ahora, quizá hay una minoría que recibe mucho dinero, pero la remuneración en general ha bajado. En cualquier caso siempre sale más a cuenta, económicamente, que el teatro. El principal problema de nuestra profesión ahora, es la falta de trabajo...
-Su compañera de reparto en la obra, Miriam Tortosa, tiene una sección de teatro en un programa de TVE 2 Catalunya ¿le gustaría hacer algo de ese estilo?
-O de otro, siempre que estuviera relacionado con mi profesión, presentar un programa ¿porqué no?, o participar en uno. Todo es, al fin y al cabo, trabajo...
-Háblenos de su vocación literaria.
- Desde niña me ha gustado leer y la vocación de escribir la he practicado, para mí (especialmente cuentos), pero sin llegar a publicar...Tengo mucho material guardado, y ya llegará el momento de sacarlo a la luz. La base de saber escribir es leer, y por supuesto, no cometer faltas de ortografía. Mi hijo tiene 28 años, lee desde los 5, y no comete ninguna...
-¿Le gustaría escribir algo que usted mismo interpretara?
-Eso no, necesito que alguien me dirija, tener un punto de referencia, me siento más a gusto.

Rubianes

-Los actores ¿deben o pueden meterse en política?
-Yo creo que no, la gente está un poco harta.Y son los políticos, precisamente, quienes hacen más teatro, como puede verse a diario.
-Dicen que se prodigan demasiado los premios en su profesión, no paran de celebrarse galas.
-Mire, si esos premios sirven para revitalizar la industria del cine o el teatro ¡bienvenidos sean!. Pero no hacerlos porque sí, para "ir sumando".
-Mucha gente le conoce por su participación en los espectáculos del añorado Pepe Rubianes, sobre todo esa discusión ficticia que tenían en escena.
-Y es una satisfacción que me recuerden por eso...Pepe era una esponja, del que todo el mundo a su alrededor aprendíamos. Estuvimos pateándonos escenarios de todo tipo por Cataluña, Mallorca, Madrid.
- Y el número que le menciona era uno de los más celebrados.
-¡Hasta el punto de que mucha gente pensaba que la discusión de pareja que teníamos en escena...era real!. Incluso un actor tan grande como el fallecido Fernando Guillén nos vio en Sitges, luego vino al camerino y elogio mi actuación en ese número: "Entiendo que es difícil estar a la altura de Rubianes, y se te ha escapado la risa" (cuando la risa era fingida, en un momento del espectáculo!)...
-¿Cree que hay alguien que haya recogido su estela, en el humor mezclado con la interpretación?
-Sinceramente, creo que no. Rubianes fue único, en la especialidad de monólogos cómicos o de humor...Me ha gustado (pero en otro estilo) Berto Romero, con el que colaboré en una gala...Y sobre todo Buenafuente. Éste organizó un espectáculo de monólogos con diez hombres, ¡ y yo era la única mujer!, pero no podía decirle que no...
-Insustituible Rubianes, sin duda.