Crítica de la obra de teatro 'Adictos': libertad y nuevas tecnologías

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lunes 26 de septiembre de 2022, 09:23h

Daniel Dicenta Herrera y Juanma Gómez, más que reconocidos realizador y actor, respectivamente, firman esta vez como dramaturgos una pieza, ‘Adictos’, que puede verse en el madrileño Teatro Reina Victoria durante las próximas semanas. Dirige la propuesta Magüi Mira y la protagonizan otras tres grandes actrices, Lola Herrera, Lola Baldrich y Ana Labordeta.

La propuesta es una ficción distópica con el terrorismo de estado como telón de fondo. El gran hermano estado, esta vez dueño de instituciones y voluntades a nivel planetario, busca entrar en las casas y en las conciencias de todas las familias y ciudadanos del mundo para controlar sus vidas, sus pensamientos y sus acciones y, de paso, eliminar a los que puedan resultar improductivos o molestos.

Lola Herrera, una de las grandes damas del teatro español, es la Dra Estela Anderson, una científica que trabaja al servicio de una poderosa compañía tecnológica en un proyecto cuya finalidad es controlar el mundo y clasificar a la población haciendo uso de un censo digital capaz de seleccionar a los “Ciudadanos prescindibles”. Cualquier gran potencia mundial estaría dispuesta a todo para hacerse con el proyecto…

Acompañan a Herrera en el reparto Lola Baldrich, la Dra. Soler, una psiquiatra y militante destacada de un grupo clandestino que intenta que un proyecto como ese no caiga nunca en manos de estado alguno y que ahora oculta a la científica y le ayuda a recobrar su memoria y su capacidad creadora. De hecho, la Dra. Anderson ha salvado milagrosamente su vida en un atentado cuando iba a presentar los logros obtenidos tras años y años de investigación. Ana Labordeta encarna, por su parte, a una periodista, Eva Landau, que anda persiguiendo desde hace tiempo a la Dra. Estela Anderson para intentar que le cuente sus avances en la investigación que lleva a cabo.

Magüi Mira, precisa como directora, y tan estupenda actriz como las tres compañeras a las que dirige, saca lo mejor de cada una de ellas para transitar durante algo más de hora y cuarto por ese inquietante, misterioso y peligroso mundo posible que presenta la función, y que lo mismo no está tan lejos de convertirse en realidad.

Ayudan a Mira en su empeño de situar al espectador en un mundo distópico y futurista la luz de colores puros de José Manuel Guerra y la siempre sencilla y eficaz escenografía de Curt Allen Wilmer y Leticia Gañán (Estudiodedos), con tres estores que marcan los espacios por donde discurre la acción. Completa, en fin, el equipo artístico Pablo Menor como diseñador de un vestuario en el que domina el blanco.

‘Adictos’ invita al espectador a pensar en sí mismo, en su creciente adicción a las nuevas tecnologías y a que sea consciente de que parte de su libertad la entrega –no siempre de forma consciente-, a empresas e instituciones que, muchas veces, saben mucho más sobre el ciudadano de lo que este pudiera imaginar. Y volver a escuchar, después de más de seis décadas sobre los escenarios, la voz cristalina de Lola Herrera, su dicción perfecta es un placer ahora al alcance de cualquier espectador.