El Banco Santander se impone finalmente en la puja por TSB, la filial británica de Banco Sabadell, por 2.650 millones de libras (alrededor de 3.100 millones de euros).
El movimiento confirma la apuesta del banco liderado por Ana Botín por Reino Unido, después de meses de especulaciones acerca de una posible salida de este mercado.
La venta de TSB a la entidad cántabra, acordada por el consejo de administración del Sabadell, se confirma después de que BBVA comunicase su intención de seguir adelante con la opa, pese a las condiciones impuestas por el Gobierno.
Una de las cuáles impedía la fusión de ambas entidades, obligándoles a operar de forma independiente por un plazo de 3 años ampliables a otros 5.
"Esta operación representa una oportunidad estratégica y resulta extraordinariamente beneficiosa para la sociedad y sus accionistas, ello con independencia de la oferta pública voluntaria de adquisición sobre la totalidad de las acciones de Banco Sabadell formulada por BBVA, que se encuentra en este momento pendiente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV)", indican en el comunicado remitido al supervisor.
Superó la oferta de Barclays
La entidad vallesana reconoció hace 2 semanas haber recibido manifestaciones no "vinculantes" para hacerse con el negocio, con NatWest como favorito.
Sin embargo, el grupo con sede en Reino Unido optó por echarse a un lado, dejando paso a Barclays y Banco Santander como favoritos.
Ahora el grupo capitaneado por Carlos Torres y Onur Genç tiene que detallar en el folleto que deberá remitir a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) el impacto de esta desinversión, que puede alterar la valoración de entre 10.000-12.000 millones que estimaban.
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