Probablemente lo que Roberto Sánchez -productor, cantante y guitarrista principal de Alchemy Project-, tiene por el grupo británico de rock Dire Straits no es sólo pasión, admiración, o reconocimiento hasta la médula. Lo de Roberto va mucho más allá: Es, sencillamente, amor, sana obsesión, casi idolatría por un grupo que lleva sonando en emisoras y equipos de música desde hace más de cuatro décadas, y con la misma elegancia, limpieza e inspiración sigue siendo percibido generación tras generación de amantes del mejor rock.
El viernes 16 de junio, y en un concierto único celebrado en el Teatro EDP Gran Vía, Alchemy Project rindió un emocionante, impecable, fiel y sentido homenaje a Dire Straits, justo cuando están a punto de cumplirse 40 años de aquel concierto de Dire Straits en Madrid, su ‘Alchemy’ en su Gira Love Over Gold (28 de junio de 1983). Y en aquel Madrid de La Movida, como en este otro Madrid convulso en lo político, lo económico y lo social, que acaba de salir de unas elecciones municipales y se encamina a otras generales, sonaron con la misma precisión, intensidad y emoción temas como Sultans of Swing, Romeo & Juliet, Tunnel of Love, Telegraph Road...
El EDP Gran Vía acogió a los sevillanos de Alchemy Project con un lleno hasta la bandera de un público (no sé muy bien por qué…), mayoritariamente masculino, que se encontraba entre los 20 y los 70 y tantos, vibrando con esa sucesión mínimamente interrumpida por Roberto Sánchez, que permaneció sereno, concentrado y absolutamente entregado en las algo más de dos horas de concierto. En él no faltaron tampoco temas de épocas posteriores como Money for Nothing, Your Latest Trick, The Man’s Too Strong, Walk Of Life y So Far Away, Brothers In Arms…
Pero, obviamente, Roberto no está solo en el escenario, sino estupendamente acompañado por un ramillete de magníficos músicos, también profundamente apasionados por la música de Dire Straits: José Marín, bajo y coros; David Carmona, en la otra guitarra de acompañamiento; Javi Cambra al saxo, flauta y percusión; Julián Carrasco, al teclado y los sintetizadores; Fernando Pujol, también a los teclados, y Juanjo Sanzo, el miembro más joven de la banda (20 añitos, ¡pero qué bien aprovechados…!), en la batería. Un año largo le costó al grupo preparar con tanta seriedad y rigor este concierto que, ahora mismo, sigue girando por diversos escenarios españoles desde que a finales de 2018 diera su primer paso presentando públicamente la formación.
El concierto, además, incluyó dos temas inconclusos de Dire Straits que la banda nunca añadió en álbum alguno. Sánchez, partiendo de un documental en el que puede escucharse algún minuto de ambos, ha completado letra y música de los mismos, siguiendo fielmente el estilo y el espíritu de la banda británica, y los ha redondeado en torno a los cinco minutos cadaqno, con verdadera sensibilidad y maestría. Se trata de Making Movies y Sucker For Punishment. Valiente y loable iniciativa que el grupo ha terminado con acierto.
Sánchez, muy joven todavía, escuchaba en casa a Dire Straits desde siempre, porque era lo que fascinaba a su padre y, desde que se empeñó en tocar la guitarra a eso de los 10 u 11 años, no ha dejado de soñar en imitar algún día a Mark Knopfler. Lo hizo esporádicamente en varios grupos y compatibilizando su trabajo de empleado de banca, más o menos acomodado y bien pagado, hasta que un día se lió la manta a la cabeza y decidió dejarlo todo para producir y formar su propio grupo musical, Alchemy Project, para tocar los temas de su banda rockera de referencia y disfrutar las 24 horas del día preparando, ensayando, produciendo y dando conciertos como el que pudimos disfrutar varios cientos de espectadores el pasado viernes en el EDP Gran Vía. Sería muy injusto que no volviesen a repetir actuación para que muchos otros seguidores madrileños de la banda británica no dejen de abrir la boca y disfrutar tanto como van a sorprenderse de la calidad y la excelencia alcanzada por los músicos españoles en la recreación de algunos de los temas míticos de la banda británica.
En la aventura personal de Roberto Sánchez ha habido contratiempos (¡cómo no…!), incluso algún pequeño o gran batacazo, pero la grandeza del luchador vehemente y convencido es que no se rinde y, al final, ahora cada concierto se cuenta como un nuevo éxito que llena de satisfacción, alegría y nostalgia a la legión de seguidores que ya tiene por toda España y buena parte de Europa. Más que respetuoso con la banda de Mark Knopler, es asombrosa la mimetización que alcanza el andaluz con el cantante y guitarrista británico (contención, gesto, voz…). Yo acudí en abril de 2008 al concierto que este dio en el Palacio de los Deportes de Madrid y no pude quitármelo de la cabeza en todo este hermoso y vibrante concierto. ¡Larga vida a Alchemy Project! ¡Viva la utopía de los valientes como Sánchez!
Ficha técnica de 'Alchemy Project (homenaje a Dire Straits)'
Concierto homenaje a la banda británica Dire Straits
Músicos:
Roberto Sánchez, cantante y guitarra principal
José Marín, bajo y coros
David Carmona, guitarra de acompañamiento
Javi Cambra saxo, flautas y percusión
Julián Carrasco, teclado y sintetizadores
Fernando Pujol, teclados
Juanjo Sanzo, batería
Teatro EDP Gran Vía, Madrid
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