'Una voz desde el mercado': También en EEUU

Ayer los datos macro se impusieron en los mercados, provocando bruscos movimientos en todos ellos. La lectura era clara y, lejos de disiparlos, lo que hicieron fue aumentar los temores sobre el crecimiento de la economía global. Esta vez, la señal vino de Estados Unidos. Las ventas al por menor y los precios de producción cayeron en septiembre, dos señales preocupantes que apuntan a que la demanda del consumidor podría estar debilitándose a la vez que la inflación no logra ganar impulso. En EE.UU, los consumidores parecen haberse vuelto más cautos. Las ventas minoristas, que representan cerca de un tercio del gasto del consumidor, cayeron un 0,3%. Mayor sorpresa fue la caída de las ventas subyacentes, que excluyen autos, gasolina, materiales de construcción y servicios de alimentación, y que se corresponden de manera más estrecha con el componente del gasto del consumidor en los cálculos del PIB. Frente al aumento esperado, cayeron un 0,2%. En cuanto a los precios industriales, retrocedieron un 0,1%, la primera caída en más de un año. Aunque muchos indicadores apuntan al fortalecimiento de la economía estadounidense, los datos que ayer se conocían vienen a reforzar la preocupación dentro de la propia Fed de que la inflación se mantenga estancada por debajo de su objetivo del 2% y las dudas acerca de si la economía está preparada para una subida de los tipos de interés en el primer semestre del próximo año, tal y como está descontando el mercado.