Andy Byron se ha convertido, en 24 horas, en uno de los nombres más famosos del mundo virtual. A pesar de que hasta que decidió ir a un concierto de Coldplay, poca gente le conocía, ahora son muchos los que buscan el nombre del CEO de la empresa Astronomer. Y el motivo es la 'pillada' en el concierto de los de Chris Martin que acabó descubriendo al mundo que estaba siendo infiel a su mujer, hecho sobre el que aún no se ha pronunciado, a pesar de un falso comunicado que ha inundado las redes.
El directivo de la startup, que está especializada en optimizar el flujo de datos en grandes organizaciones, fue descubierto por la 'Kiss cam' del concierto muy acaramelado con Kristin Cabot, directora de Recursos Humanos de su compañía. Pero, en cuanto se vieron en pantalla, sus sonrisas se tornaron en gestos de preocupación y desaparecieron del plano, ya que los dos tienen, o tenían, pareja.
Y es que este viernes se ha sabido que, Megan Kerrigan, la mujer de él, ha reaccionado eliminando su apellido de casada, Byron, de su perfil de Facebook y, más tarde, borrando del todo su cuenta en esa red social ante la repercusión de la infidelidad de su marido.
Pero es que el portal estadounidense TMZ también se ha puesto en contacto con Astronomer y la compañía ha confirmado que el comunicado de disculpas de Byron que se había viralizado "no es una declaración real".
Así era el falso comunicado
"Quiero reconocer el momento que ha estado circulando por la red y la decepción que ha causado. Lo que se suponía que sería una noche de música y alegría se convirtió en un error profundamente personal que se desató en un escenario muy público. Quiero disculparme sinceramente con mi esposa, mi familia y mi equipo de Astronomer. Merecen algo mejor de mí como compañero, como padre y como líder", empezaba diciendo el falso comunicado.
Pero, además, estas presuntas palabras del empresario también afeaban que "lo que debería haber sido un momento privado se haya hecho público" sin su "consentimiento". "Respeto a los artistas y al público, pero espero que todos podamos reflexionar más profundamente sobre el impacto de convertir la vida de otra persona en un espectáculo", seguía el falso texto, parece que echando la culpa a Chris Martin, vocalista de Coldplay.