Crítica de la obra de teatro 'La importancia de llamarse Ernesto': el precio de la libertad

Dirigido por David Selvas e interpretado por María Pujalte, Pablo Rivero, Paula Malia, Ferran Vilajosana, Paula Jornet, Albert Triola y Gemma Brió, acaba de presentarse en el Teatro Español de Madrid el clásico del irlandés Oscar Wilde ‘La importancia de llamarse Ernesto’, pero con aires de musical indie.

La obra dramática es uno de los mayores e inteligentes exponentes de la escritura teatral de Wilde ya que en ella el autor irlandés despliega todos sus recursos para atacar sin piedad alguna a la sociedad de finales del XIX atravesada por la impostura y la hipocresía sociales. Entonces, como ahora -no hay más que echar un vistazo a las redes sociales y a la infinita profusión de selfies-, importa mucho más parecer que ser, aparentar ser honesto, leal o humilde que serlo de verdad.

La música original de una de las actrices del elenco, Paula Jornet, dotan de una gracia añadida al ágil y dinámico montaje que ya fue estrenado en catalán en 2018 y, desde entonces, no ha dejado de encandilar al público. Entre otras cosas, y fundamentalmente, porque no es fácil encontrar a actores y cantantes que lo sean verdaderamente y al mismo tiempo y aquí lo es todo el elenco.

La propuesta, en todo caso, no se sale ni un ápice de la fábula creada por Oscar Wilde y pone en escena la doble vida que arrastran dos jóvenes británicos, las estrategias de las que echan mano para hacer lo que les da la gana en cada momento, las múltiples confusiones a que dan lugar, los enamoramientos casi de flechazo que viven paralelamente y las dificultades que tienen ambos por mor de la mojigatería imperante en el seno de la sociedad que les ha tocado vivir.

Los inteligentes diálogos, el dinamismo de la acción, el movimiento de los actores, lo inspirado de las composiciones musicales y el deslumbrante gracejo de los intérpretes hacen de ‘La importancia de llamarse Ernesto’ una comedia ágil, divertida y magnética que el público acoge con facilidad y regocijo y que premia con un largo aplauso al término de la función.

El espacio escénico, diseñado por Jose Novoa, presenta una gran mansión inglesa, con un gran ventanal en medio, que unas veces se abre al exterior y otras oculta al ojo del vecindario cuanto ocurre en ella, simplemente corriendo unas enormes cortinas. Mingo Albir ilumina la estancia con precisión de orfebre, Lucas Ariel Vallejos regula a la perfección el sonido de voces y músicas, Maria Armengol viste a los personajes con elegancia y refinamiento, Paula Ayuso los caracteriza y, por último, Pere Faura dibuja sus refinados y armónicos movimientos en escena.

La libertad que buscan los dos jóvenes muchachos no les va a resultar nada fácil adquirirla y solo emulando a sus dos amadas, mucho más libres e inteligentes que ellos, Gwendolen y Cecily, acabarán por conseguirla. La comedia, en fin, recorre el espíritu del autor irlandés y no se ve alterada por la inclusión de canciones y melodías que la dotan de un aire aún más festivo y gracioso.

‘La importancia de llamarse Ernesto’

De: Oscar Wilde

Dirección: David Selvas

Traducción: Cristina Genebat

Con María Pujalte, Pablo Rivero, Paula Malia, Ferran Vilajosana, Paula Jornet, Albert Triola y Gemma Brió

Diseño de espacio escénico: Jose Novoa

Diseño de iluminación: Mingo Albir

Diseño de sonido: Lucas Ariel Vallejos

Diseño de vestuario: Maria Armengol

Caracterización: Paula Ayuso

Coreografía y movimiento: Pere Faura

Dirección musical: Pere Jou y Aurora Bauzà (Telemann Rec)

Composición música original: Paula Jornet

Una producción de Teatre Nacional de Catalunya, La Brutal y Bitò Produccions

Teatro Español, Madrid

Hasta el 19 de febrero de 2023