La primera temporada de 'Los Anillos de Poder' ha llegado a su fin con un octavo capítulo en el que se han contestado los principales preguntas que se venían haciendo desde los primeros capítulos. Esta conclusión ha sido excelente uniendo puentes con las películas de Peter Jackson y elevando el tono de una serie que había tenido verdaderos altibajos en sus episodios.
(ATENCIÓN SPOILERS)
Empecemos con o que todo el mundo se estaba preguntando, quién de los personajes era Sauron y quién era el Extraño, las dos preguntas se han resuelto con las respuestas que más se barruntaban, Hallbrand y Gandalf, pero la falta de sorpresa se ha visto compensada por lo bien desarrolladas que han estado ambas. Queda claro definitivamente que lo que han querido hacer los creadores, Patrick McKay y John D. Payne, es unir esta serie al imaginario de la trilogía original de Jackson sin importarles tanto el imaginario del escritor J.R.R. Tolkien, aunque sin traicionar nunca su esencia, esto es el bien contra el mal o la alianza entre extraños de todas las razas y pelajes.
He de decir que me gustaron bastante los capítulos iniciales dirigidos por J.A. Bayona, siendo una presentación de personajes muy interesante, pero que luego esa presentación se hizo muy larga con el paso de los siguientes capítulos, pareciendo que la trama no avanzaba lo suficientemente rápido. Pero creo que este último capítulo lo ha compensado, siendo una maravilla con varios momentos realmente excelentes. Desde ese inicio en el que nos engañan para que pensemos que el Extraño es Sauron a la maravillosa escena en la que Galadriel finalmente se enfrenta al verdadero Sauron y este le dice lo mismo que ella repetirá a Frodo miles de años después cuando este le ofrezca el anillo único: "No una tirana, sino una reina. Bella como el mar y el sol. Más fuerte que los cimientos de la Tierra".
Muy por encima de los anteriores
Pero es que el guión de este último episodio ha estado muy por encima de los anteriores, quizás sea la experta mano de Gennifer Hutchison, que ha escrito para 'Breaking Bad' y 'Better Call Saul', que colabora con los dos creadores. El caso es que hay varios momentos espectaculares, principalmente emocionante me ha parecido todo lo relacionado con el Extraño y Nori, dejando claro de una vez que, aunque no se le nombre, estamos ante Gandalf, dando al cariño de este por los futuros hobbits una enorme carga afectiva.
Y qué decir de la dirección, a cargo de Wayne Che Yip, que ha dejado varios planos para el recuerdo, Galadriel y Sauron reflejados en el agua como señores de la Tierra Media, el fuego del Monte del Destino cubriendo el ojo de Hallbrand en un claro paralelismo al Ojo de Sauron de 'El Señor de los Anillos', la creación de los tres anillos de los Señores elfos. Una verdadera pasada que confirma que, a pesar de no contar con Bayona, han sabido sacar todo el partido a su abultado presupuesto.
En definitiva, que me da igual el canon y el lore (sea lo que sea eso), lo que está claro es que este capítulo final ha sido una verdadera pasada que deja la expectación al máximo por una segunda temporada que no llegará hasta febrero de 2024. Sí ha habido muchas cosas que mejorary 'Lon Anillos de Poder' ha estado bastante lejos de ser perfecta, con bastantes altibajos de ritmo, además de que no todas las historias han funcionado igual, pero hay suficientes elementos en ella y, sobre todo, en este final (joder, hasta ha cantado Fiona Apple) para convertirla en el futuro en una gran serie.
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