Los mercados se mantienen en compás de espera ante la publicación hoy del dato de creación de empleo no agrícola en Estados Unidos, con unas estimaciones en torno a 75.000 nuevos puestos en agosto. El informe llega en un contexto de clara desaceleración del mercado laboral, evidenciado por la caída en la creación de empleo privado (54.000 en agosto, según el informe ADP), el aumento de despidos y unas solicitudes de subsidio por desempleo en máximos de los últimos tres meses.
El Libro Beige de la Reserva Federal, publicado esta semana, confirma esta dinámica al reflejar una menor disposición de las empresas a contratar, una desaceleración en los costes salariales y una mayor sensibilidad del consumo al precio. El informe apunta a un enfriamiento generalizado de la actividad. El dato de empleo será clave para validar las expectativas del mercado, que asignan alta probabilidad a un recorte de tipos en la reunión de la FED del 17 de septiembre. No obstante, la inflación aún por encima del objetivo y las presiones políticas sobre la autoridad monetaria elevan el grado de incertidumbre.
En Europa, el BCE parece haber alcanzado un punto de equilibrio. Con una inflación estabilizada cerca del 2 % y una economía moderadamente resiliente, el consenso apunta a una pausa en el ciclo de recortes. Sin embargo, las caídas en las ventas minoristas y las revisiones a la baja del crecimiento en Alemania evidencian una recuperación frágil. El limitado estímulo fiscal y la ausencia de reformas estructurales siguen pesando sobre el panorama regional.