Murcia celebró este fin de semana las fiestas del Orgullo y el sábado la cantante Rocio Saiz ofreció un concierto en la plaza del Cardenal Belluga, pero la fiesta acabó de la peor forma.
Como ha contado la cantante en sus redes sociales, lleva 10 años quitándose la camiseta al cantar 'Cuando yo te amo', pero en esta ocasión la Policía Local paralizó el concierto y la denunció.
Al enseñar los pechos en el escenario, un agente paró la actuación y le amenazó con que o se ponía la camiseta o "se iba esposada".
Sin embargo, la Jefatura de la Policía Local de Murcia ha abierto un expediente interno para investigar la actuación del agente.
"Con esta investigación vamos a determinar la responsabilidad del inspector, si se deriva alguna; la actuación no fue la correcta y por eso se abre un expediente", han explicado desde la insitución.
Las mismas fuentes de la Policía confirmaron que "no existe ningún delito y por eso no va a haber ningún atestado judicial; no se pretendía perturbar el ejercicio a los derechos de la artista".
El informe interno que redactó el agente en cuestión aludió al artículo 37 de la Ley Mordaza, en el que se especifica en uno de sus puntos como falta leve "la realización o incitación a la realización de actos que atenten contra la libertad e indemnidad sexual, o ejecutar actos de exhibición obscena, cuando no constituya infracción penal".
"Ese artículo especifica que tienen que ser actos obscenos, y ahí no hubo ninguno; tampoco hubo exhicionismo, ni acto de carácter sexual, simplemente se descubrió los pechos como un acto político", interpreta el jurista y exconcejal del Ayuntamiento de Murcia, Sergio Ramos, quien matiza que este artículo "no está hecho para eso, no hay base jurídica y además la Ley Mordaza no puede aplicarse a conciertos ni eventos culturales".
La Policía Local de Murcia ha insistido en que "se va a investigar todo en su conjunto, si existió esa infracción leve por la que podría derivarse la imposición de una multa, y la actuación policial", aunque en el caso de que se determine que el agente actuó "errónamente" se desconoce todavía qué sanción se le impondría.
"El policía sabía que se estaba pasando de frenada porque si no, le habría puesto una denuncia", ha considerado Esther Nevado, concejala socialista del Ayuntamiento de Murcia, que estuvo el sábado en el concierto del Orgullo.
"El quitarse la camiseta de Rocío es un gesto artístico, pero al policía no le pareció bien y a raíz de pedirle que se cubriera se desencadenó toda la polémica; Rocío se vio amenazada e increpada, y no es la primera vez que le pasa algo similar en la Región".
Ya le sucedió en 2018
Es la segunda ocasión en la que Sáiz se enfrenta a problemas "de censura" por quitarse la camiseta en un concierto en la Región de Murcia.
En 2018 la entonces cantante de Las Chillers recibió las críticas del PP de Molina de Segura -"irrespetuoso", "carente de valores" y "erótico"- por enseñar los pechos durante un concierto que ofrecieron en el festival de música B-Side.
En dicha ocasión, el Ayuntamiento molinense, en aquel momento gobernado por el PSOE, defendió "la libertad de las artistas" y aseguró que no hubo "faltas de respeto" por parte de la artista.
Desde la organización le insistieron en que se la pusiera para poder continuar el show mientras la Policía les seguía amenazando.
La cantante cedió y se cubrió, pero al finalizar su actuación a ritmo de 'Sobreviviré' se la quitó otra vez, por lo que los agentes le esperaron bajo el escenario para pedirle la documentación".
"Es lo que habéis votado"
La propia artista ha criticado lo ocurrido en redes sociales en un duro mensaje en el que asegura que "cada vez está más cerca de dejar la música" y de "dejarlo todo", pues como bien indica "no se lo merece".
Ha detallado que al acabar la actuación el inspector le señaló que "había incumplido no sé cuántas leyes" y que le iba a abrir un atestado policial "por enaltecimiento del orden y exhibicionismo".
Ha asegurado que le tomaron los datos y que le llegará la multa.
Preguntó al Policía que si ella fuese un hombre si le estaría denunciando, a lo que el agente respondió que "no" "porque si lo hace un hombre no es ilegal".
Para acabar la artista ha lamentado que el agente le espetó que "es lo que habéis votado", una frase a la que la cantante ha dado tristemente la razón y ha subrayado que "el problema no es él", sino efectivamente "lo votado" en una clara referencia al auge de Vox y sus leyes homófobas.
Las redes han cargado contra este suceso y se han volcado con la cantante animando a combatir a la extrema derecha:
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