San Isidro: Saldívar y Florito, los menos malos en otra tarde soporífera, y van...

Ríase usted de la chaqueta metálica y otras cuestiones de yankilandia. Ríase. Porque en vista de que el burro con cuernos no obedecía a los cabestros, menos mansos que él, cogió el mayoral Florito, se enfadó y echó mano de su chaquetilla mágica, mítica y poderosa. Barbeó tablas por dentro y obligó al burro con cuernos a entrar de nuevo en toriles mediante una especie de larga por alto. Restallaron las palmas como no lo hicieron en el resto del festejo o lo que fuera aquello.

Y, claro, si Florito es el triunfador de la tarde, poco más hay que contar. Bueno, sí. El otro hecho destacado, para mal, para peor todavía, fue el empeño del presidente César Gómez-cómo nos acordamos del grito de guerra del pobre Salva Valverde en el 7 en casos así: "¿A quién defiende la autoridad?". Pues a los intereses de los taurinos, no a los de la afición, porque el sustituto de ese quinto fue otro burro con cuernos, de la divisa de Encinagrande, que estaba más inválido todavía y al que mantuvo en el ruedo entre enormes broncas 

Con lo que salió perdiendo, aparte de la afición pagana, y toreada, el coletudo mexicano, quien se estrelló ante la flojera del burro con cuernos, añadida a su descaste generlizado y olé. Al menos, el segundo burro con cuernos, un punto menos flojo, un punto menos descastado, le permitió algunas suertes con percal y flámula, siempre con la quietud como denominador común,  para demostrar que, al igual que en 2011,cuando fue una de las revelacioens del abono, quiere ser figura y puede serlo si lidia toros y no burros.
El que parece triste, abúlico y aburrido es Miguel Abellán, premioso y vulgarísimo, además ante sus dos burros, a los que no sacó ni un pase decente. Sí lo intentó Víctor Barrio, aunque era misión casi imposible y también frente al sexto -con el tercero más que imposible- anduvo por la cara del burro con cuernos y le extrajo algún muletazo estimable. En definitiva, la Feria sigue como se preveía cuando salieron sus carteles. De petardo en petardo.

FICHA

Cinco toros de FERMÍN BOHÓRQUEZ, desiguales de presentación y feos de hechuras; descastadísimos, mansos y blandos. 5º, sobrero, de ENCINAGRANDE, de similar guisa y más inválido que al que sustituyó. MIGUEL ABELLÁN: palmas y pitos al saludar; silencio. ARTURO SALDÍVAR: ovación tras aviso; silencio tras aviso. VÍCTOR BARRIO: silencio; ovación.. Plaza de Las Ventas, 17 de mayo. 9º de Feria, Casi lleno.