Las primas a las
renovables ascenderán a 8.400 millones frente a la previsión de 7.220
millones
La reforma energética en entredicho: el deficit de tarifa podría triplicar el tope legal
lunes 26 de noviembre de 2012, 10:05h
El déficit de tarifa, la diferencia entre lo que
cuesta producir la energía y lo que pagamos en el recibo de la luz,
podría dispararse este año hasta los 5.000 millones. El objetivo fijado
por el Gobierno es de 1.500 millones y, de confirmarse, este desfase
también pondría en riesgo la previsión de deficit cero en 2013. El
Gobierno avisa que tardaremos en pagar esta deuda, que en total supera
los 24.000 millones de euros, 20 o 30 años.
Las eléctricas calculan que el
déficit de tarifa de 2012 rondará los 5.000 millones de euros y superará
en 3,3 veces el tope legal de 1.500 millones establecido para el
conjunto del ejercicio. A un mes para que concluya el año, los
departamentos de regulación de las empresas ya empiezan a disponer de
previsiones certeras y en ellas aparecen cifras que oscilan entre los
4.800 millones de euros y los 5.000 millones. De confirmarse, el
presente ejercicio será el cuarto en el que la cifra final supera el
tope legal y se convertirá además en el tercero más deficitario.
De los costes eléctricos, las compañías pronostican que las primas a las
renovables ascenderán a 8.400 millones frente a la previsión de 7.220
millones, y que el extracoste de la actividad insular no se traspasará a
los Presupuestos Generales del Estado y rondará los 1.300 millones,
frente a los 473 millones previstos. Por otro lado, la caída de la
demanda y el menor volumen de ingresos provocado por la crisis impedirán
que la revisión retroactiva de tarifas ordenada por el Tribunal
Supremo, consistente en un prorrateo al alza del 7% entre septiembre y
diciembre, no sea suficiente.
De esta forma, el sector da por hecho que el Gobierno se quedará muy
lejos de cumplir los objetivos, a pesar de los recortes de marzo y de
las subidas de tarifas, y se pregunta qué decisión adoptará el
Ministerio de Industria para parchear el sistema eléctrico.
Para gestionar estos 3.500 millones de exceso de deuda, Industria maneja
dos opciones. La primera sería colocar en los mercados de deuda, como
está previsto, los 1.500 millones hasta el tope legal y trasladar los
3.500 millones de exceso al ejercicio 2013, lo que ejercería una presión
difícil de asumir para un sistema eléctrico que debe dejar de ser
deficitario el año que viene.
La segunda alternativa consiste en elevar el tope legal de 2012 por
encima del máximo de 1.500 millones de euros, como ya hizo en su momento
el anterior ministro de Industria, Miguel Sebastián. Y también podría
darse una tercera opción, aunque muy poco probable, consistente en
renunciar al límite de déficit tarifario cero en 2013 y fijar un nuevo
umbral de deuda para el año que viene, lo que se interpretaría como una
pérdida de credibilidad para nuestra economía.
Nuevas subidas de la luz
Para 2013, el sector ve difícil que se cumpla el compromiso del
secretario de Estado de Energía, Fernando Martí, expresado el pasado
viernes en el Senado, de no subir los peajes eléctricos durante el año.
Esos peajes, que dependen del Gobierno, equivalen a la mitad de la
tarifa de último recurso, que pagan 20 millones de consumidores. La
intención inicial del Ejecutivo es dejar la pelota de nuevas subidas de
la luz en el tejado de las eléctricas.
En enero entrará en vigor la nueva fiscalidad eléctrica, pero las
empresas dudan de que sea suficiente para taponar este agujero. La nueva
ley incluye tres nuevos impuestos, que son del 6% a la producción de
electricidad, sobre la producción de combustible nuclear, y sobre el
almacenamiento de combustible nuclear y residuos radioactivos en
instalaciones centralizadas. Además, se crea un canon por uso de las
aguas continentales para la producción de energía eléctrica y se
modifican los tipos impositivos establecidos para el gas natural y el
carbón.
Una deuda de décadas
"¿Saben cuánto tiempo van a pagar nuestros hijos y nuestros nietos
los excesos de las primas y el déficit de tarifa? Veinte o treinta
años". El secretario de Estado de Energía ha ilustrado de esta forma,
como si de una maldición bíblica se tratara, el coste que tendrá para la
sociedad española sacudirse la deuda del sistema eléctrico que asciende
a 24.000 millones de euros.
Fernando Martí ha asegurado que "los consumidores, sus hijos y sus
nietos" van a tener que devolver la actual deuda eléctrica. Un problema
causado por "decisiones regulatorias mal hechas" y que justifica, según
Martí, las medidas adoptadas por el Gobierno para cubrir la deuda
subiendo tarifas, poniendo impuestos eléctricos o atendiendo a un parón
de energías verdes.
En su opinión es muy probable que el sistema eléctrico español entrara
en quiebra si no se hubiesen adoptado las decisiones aprobadas este año
por el Gobierno. No obstante, si se confirma este nuevo agujero de 5.000
millones significará que las medidas no han funcionado o, cuanto menos,
no han surtido el efecto esperado.