A partir de hoy la agenda económica estará marcada por los datos definitivos de IPC de países como Alemana, Francia, España o Italia, que confirmarán el descenso de los precios en línea con lo publicado por los datos adelantados. La sorpresa podría venir por descensos mayores de lo estimado aumentando los riesgos de deflación en la eurozona. A esto hay que añadir la creciente preocupación con respecto a la recuperación económica de la eurozona. Ayer se publicaron los datos de producción industrial de Francia del mes de octubre, que cayó un 0,8% con respecto al mes anterior. En este entorno la presión para que el BCE ponga en marcha un programa de compra de bonos soberanos es cada vez mayor, sobre todo cuando las medidas actuales parecen ser insuficientes. Hoy los mercados estarán pendientes del resultado de la segunda subasta de liquidez del BCE, dinero que debe ser destinado a la concesión de créditos al sector privado, con excepción de préstamos para la compra de viviendas. En la subasta de septiembre, los bancos europeos solicitaron 82.602 millones de euros. En la de hoy, las estimaciones apuntan a unos 150.000 millones de euros. Si se cumplen las expectativas, el total inyectado en subastas estaría en torno a los 232.000 millones de euros. Los planes de compras de títulos respaldados por activos podrían suponer unos 300.000 millones. En total unos 532.000 millones, poco más de la mitad del billón de euros en los que el BCE quiere aumentar su balance.
Otras 'voces desde el mercado'
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