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‘Sobre el caparazón de las tortugas’
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‘Sobre el caparazón de las tortugas’ (Foto: Antonio Castro)

Crítica de la obra de teatro 'Sobre el caparazón de las tortugas': amor, odio, fracaso

miércoles 12 de abril de 2023, 10:53h

Ignasi Vidal escribe y Susana Hornos dirige 'Sobre el caparazón de las tortugas', un drama que estos días puede verse en la Sala Jardiel Poncela del madrileño Teatro Fernán Gómez. Protagonizan el montaje dos estupendos actores, Raquel Pérez y Nacho Guerreros que, en medio de un patio andaluz con olores y sonidos de Semana Santa sevillana, delimitado por un sinfín de recuerdos y reproches mutuos, cuentan entre bromas, veras y constantes y letales dardos dialécticos el cómo y el porqué del fracaso de una pareja de actores de éxito que, sin embargo, no han sabido orientar en ningún momento su relación de pareja.

Sólo dos personajes en escena, Alicia y Héctor, separados hace ya una década, cultos, triunfadores profesionalmente, pero fracasados en su relación matrimonial, vuelven a reunirse para hablar de un asunto común, ineludible y problemático, la ya preocupante evolución de su hija quinceañera con problemas de sobrepeso que ya empiezan a ser serios, y con constantes problemas de conducta y de fracaso escolar. La aparentemente civilizada relación de los dos actores muy pronto se verá envuelta en una desbocada huida, del sentimiento de culpa, de un echar balones fuera para intentar hacer al otro responsable de la situación de la hija que habían adoptado para paliar la frustración de no haber podido tener un hijo natural.

Los dardos envenenados, el sarcasmo, la ironía, la mordacidad, la corrosiva virulencia verbal en la que Héctor y Alicia se enzarzan, contrasta brutalmente con los sonidos de cornetas y tambores y el olor a incienso y azahar que destilan las procesiones sevillanas de Semana Santa que, por momentos, se cuela en el patio de la casa donde la expareja mantiene un encuentro que se parece más a un combate de artes marciales cuyo objetivo esencial es más el de noquear al contrincante que el de buscar salidas posibles a la situación de la hija que ambos tienen en común.

Es un placer ver evolucionar sobre el escenario a Raquel Pérez y a Nacho Guerreros, absolutamente metidos en sus personajes respectivos. Una, Alicia, excesivamente enamorada ahora del alcohol y presionada por la vida hasta el punto de haber protagonizado varios intentos de suicidio. Otro, Héctor, obsesionado por las mujeres el resto del año, y ahora con su papel de nazareno que anhela volver a procesionar con su hábito, su capirote y su cíngulo ceñido para poder pensar durante horas y en ese silencio interior adornado por el bullicio de fuera, en el sinfín de pecados y culpas a expiar. Virtudes públicas, vicios privados los que adornan a los dos protagonistas de 'Sobre el caparazón de las tortugas'.

La obsesión de Alicia por las tortugas marinas acaba dando el título al montaje porque esos animales marinos, que llegan a vivir hasta dos siglos, se protegen de los peligros que vienen de fuera con un extraño y perfecto caparazón. Justo el que le gustaría tener a Alicia para poder sobrevivir a los recuerdos, el napalm que corroe nuestras conciencias y nos hace extremadamente vulnerables y envejecer ahogados en tristezas y fracasos sin solución.

Muy interesante la dirección de Susana Hornos que, con sólo dos actores en escena, con movimientos lentos o enérgicos según las escenas, consigue hacer del montaje -unos 75 minutos de duración-, un espectáculo tenso y hermoso a la vez que atrapa al espectador en todo momento. Acertada la escenografía y el vestuario de Anselmo Gervolés y la intimista iluminación de Sergio Aguilera.

Un espectáculo que dejará más que satisfechos a aquellos espectadores que busquen mil y un matices en la interpretación, que con tanta maestría atesoran los dos grandes actores que ha elegido Susana Hornos. Acierto pleno.

'Sobre el caparazón de las tortugas'

Autor: Ignasi Vidal

Dirección y Espacio sonoro: Susana Hornos

Con: Raquel Pérez y Nacho Guerreros

Escenografía y vestuario: Anselmo Gervolés

Iluminación: Sergio Aguilera

Ayudante de dirección: Candela Aréstegui

Coordinación de vestuario: Yolanda Aréstegui

Diseño gráfico: José Miguel Stellutti y María La Cartelera

Prensa y Comunicación: María Díaz

Producción: Jesús Cisneros

Una producción de Descalzos Producciones

Producción asociada: Juan Manuel Álvarez y Mónica Salinas (Dentalram)

Distribución y gira: Isabel Rufino Distribución

Teatro Fernán Gómez, Madrid

Hasta el 23 de abril de 2023

José-Miguel Vila

Columnista y crítico teatral

Periodista desde hace más de 4 décadas, ensayista y crítico de Artes Escénicas, José-Miguel Vila ha trabajado en todas las áreas de la comunicación (prensa, agencias, radio, TV y direcciones de comunicación). Es autor de Con otra mirada (2003), Mujeres del mundo (2005), Prostitución: Vidas quebradas (2008), Dios, ahora (2010), Modas infames (2013), Ucrania frente a Putin (2015), Teatro a ciegas (2017), Cuarenta años de cultura en la España democrática 1977/2017 (2017), Del Rey abajo, cualquiera (2018), En primera fila (2020), Antología de soledades (2022), Putin contra Ucrania y Occidente (2022), Sanchismo, mentiras e ingeniería social (2022), y Territorios escénicos (2023)

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