Tras las primeras investigaciones de Israel por lo ocurrido con los cooperantes de la ONG del chef español José Andrés, World Central Kitchen (WCK), fallecidos tras un ataque del Ejército de este país, crece la indignación internacional.
El informe preliminar del Ejército israelí ha concluido que dicho ataque contra el equipo de WCK, en el que murieron 7 de sus trabajadores, no tuvo la "intención de dañar a los trabajadores humanitarios".
Además, acusó a esta ONG de llevar una "identificación errónea", que llevó a su intervención.
“These are the heroes of WCK. These 7 beautiful souls were killed by the IDF in a strike as they were returning from a full day's mission. Their smiles, laughter, and voices are forever embedded in our memories.” - Erin Gore, CEO. Read more: https://t.co/4f38RQ1l4Ipic.twitter.com/neAsSzKVP5
El jefe del Estado Mayor de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), Herzi Halevi, explicó que una "entidad independiente investigará el incidente exhaustivamente", y que las conclusiones finales estarán disponibles en los próximos días.
"Quiero decirlo claramente: no hubo ningún ataque intencionado contra los trabajadores humanitarios de la organización WCK. Este complejo incidente es el resultado de una identificación errónea en condiciones difíciles, durante la noche y durante la guerra. No debería haber sucedido", insistió Halevi.
"El ataque es un grave error: Israel está en guerra con Hamas, no con los residentes de Gaza, por lo que lamentamos el daño involuntario a los empleados de WCK; compartimos el dolor de sus familias", comentó.
"Las FDI trabajan en estrecha cooperación con la organización World Central Kitchen (WCK) y aprecian enormemente su importante trabajo", afirmó.
Además, prometió que el Ejército "aprenderá de sus conclusiones, implementará medidas inmediatas y compartirá esas conclusiones con WCK y otras organizaciones internacionales relevantes".
El presidente del país, Isaac Herzog, llamó por teléfono al chef José Andrés para disculparse en persona.
EEUU pide explicaciones
Como ya hiciera ayer mismo el presidente español, Pedro Sánchez, el estadounidense, Joe Biden, afirmó estar "indignado y desconsolado" por el ataque contra WCK y pidió a Israel "hacer más" para proteger a los cooperantes internacionales de ayuda humanitaria.
Su secretario de Estado, Antony Blinken, también solicitó a su país aliado "una investigación rápida, completa e imparcial" sobre el ataque y llamó "héroes" a estos trabajadores fallecidos, que "deben ser protegidos".
Humanitarian workers are heroes. They show the best of what humanity has to offer.
I extend my deepest condolences to those who lost their lives in the strike on @WCKitchen in Gaza. There must be a swift, thorough, and impartial investigation into this incident. pic.twitter.com/SHtHtyfexy
— Secretary Antony Blinken (@SecBlinken) April 2, 2024
Australia también se posiciona
Por su parte, el primer ministro australiano, Anthony Albanese, ha exigido a Netanyahu un proceso "claro y transparente" para esclarecer la muerte de los 7 cooperantes, entre los que se encontraba uan ciudadana australiana.
I expressed Australia’s anger and concern at the death of Zomi Frankcom to Prime Minister Netanyahu in a phone call this morning.
We have called for full transparency and accountability, and for aid to reach Gaza unimpeded and in large quantities. pic.twitter.com/B5MfACGteO
Albanese dejó claro su "enfado": "Le he dejado muy claro al primer ministro Netanyahu que los australianos están enfadados por esta tragedia".
Mientras, en las calles, tuvo lugar una manifestación de protesta para lamentar la muerte de la voluntaria australiana Zomi Frankcom y exigir represalias contra Israel por el ataque.