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Crítica de la película

'Camino a la libertad': Una huida que deja frío

'Camino a la libertad': Una huida que deja frío

martes 04 de enero de 2011, 12:10h
Este 'Camino a la libertad' no podía venir con mejores mimbres, detrás de las cámaras, nada menos que Peter Weir, delante de ellas, el siempre fascinante Ed Harris, en cambio, al final de sus más de dos horas de duración, la sensación es de decepción. A pesar de estar bien realizada e interpretada, el camino a la libertad, desde un Gulag siberiano hasta la India, de estos personajes no logra emocionar en ningún momento, sino sólo un poso de indiferencia.
Una pena, porque Peter Weir había demostrado ser más que capaz de conjugar de manera magistral la épica con la emoción humana, valgan como ejemplo 'Master & Commander' o 'Gallipoli'. La película narra la fabulosa huida de un grupo de prisioneros de un gulag, y como se tendrán que enfrentar a la naturaleza en sus más peligrosas formas, el frío siberiano, el desierto del Gobi y las cumbres del Himalaya. Todo está rodado con una combinación de espectaculares paisajes, a lo David Lean, y primeros planos de las cicatrices que va dejando en los protagonistas. La épica está conseguida, pero el problema de 'Camino a la libertad' es que no logra la emoción. 

A pesar de un arranque prometedor, los primeros minutos en el campo son lo mejor de la película, esta huida hacia la libertad va perdiendo fuelle según se va alejando de la helada Siberia. En ningún momento logra emocionar con sus muchas desventuras, y eso es algo realmente imperdonable en este tipo de historias. 

Cuando cuentas una historia como esta, hay que lograr no solo fascinar, sino también emocionar al espectador y Weir no lo consigue. Sus personajes no logran calar, son planos y demasiado estereotipados. La culpa no es de los actores, Jim Sturguess y Colin Farell cumplen con corrección y Ed Harris vuelve a estar por encima de la película, como en la mayor parte de su filmografía.

Lo más descorazonador del asunto es que tras entregar sus dos mejores películas en su etapa americana ('El show de Truman' y 'Master & Commander') y tras una espera de siete años, 'Camino a la libertad' no es lo que uno esperaba del director de 'El año que vivimos peligrosamente'. Quizás las expectativas fueran demasiado altas pero esta película me ha dejado totalmente frío.


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